Demandas por vicios de trámite y de fondo en contra del PND contradicen lo dicho por Néstor Humberto Martínez antes de su retiro de Presidencia.
El saliente ministro de la Presidencia aseguró hace unas semanas que la conciliación del Plan Nacional de Desarrollo, que ya cuenta con sanción presidencial, se hizo con ‘todas las de la ley’ y que el Gobierno cuidó “con mucho juicio que estuviera blindada de vicios”.
Por esos días la Alianza Verde advertía que durante esa reunión se dieron vicios de trámite, luego de que salieran a la luz unas fotos en las que aparece el texto de conciliación sin fecha, ni hora de registro y –al parecer- sin la presencia del secretario. ¿Conciliación del PND se hizo mal y ‘a las carreras’?
Ante los hechos, Martínez respondió en La W que el encuentro “se llevó con todas las normalidades” y que su cartera estaba analizando los memoriales que la Alianza Verde envío al presidente Juan Manuel Santos, en los que pedían devolver el escrito al Congreso para subsanar esos vicios de trámite y así evitar complicaciones con la Corte Constitucional.
Añadió que el equipo jurídico del Gobierno se encargó de vigilar con lupa el proyecto desde sus inicios.
“Lo cierto es que, con el concurso del Congreso, hemos verificado uno a uno los pasos y estamos conformes. Podemos decirle al país con absoluta certeza que realmente se cumplieron las normas de procedimiento en la conciliación”.
Sin embargo, la maratón de demandas que se le viene al Plan Nacional de Desarrollo pone en entredicho lo manifestado por Martínez.
De acuerdo con Iván Cepeda, senador del Polo Democrático, en la conciliación que se llevó a cabo en la Cámara de Representantes hubo falta de quórum y sí se registraron vicios de forma. Por eso decidieron demandar ante la Corte.
“Se negó la posibilidad los artículos más importantes (…) el trámite estaba viciado”, afirmó.
Lo dicho por el parlamentario va en sintonía con una serie de denuncias que este medio reveló semanas atrás, las cuales ponen en evidencia las presuntas ‘triquiñuelas’ que el Gobierno Nacional utilizó para dar luz verde al PND en la plenaria del Senado. Vea el informe.
A pesar de que solo se conoce la demanda que el Polo radicó ante la Corte Constitucional, que busca que se declare la ilegalidad de varios renglones del PND como el que permite la actividad minera en zonas de páramo, Cepeda confirmó que están preparando siete demandas más (puede que sean más), que tocarían temas de vicios de fondo y trámite, salud y concesiones mineras.
La que ya hace carrera en la corte busca tumbar los artículos 20, 49, 50, 51 y 52, que reglamentan los denominados Proyectos de Interés Estratégico Nacional PINE, y que dictan la imposibilidad jurídica de la restitución de tierras en predios en los que haya Proyectos de Interés Nacional Estratégico.
Según Alirio Uribe, representante a la Cámara del Polo, los PINE le dan al ejecutivo la reglamentación de unos proyectos que son asimilados de utilidad pública. Es decir: se puede expropiar en nombre de la minería, las hidroeléctricas y las obras viales.
La explotación minera en zonas de paramos ya había generado miedo en el Congreso. Antes de la conciliación, una mayoría en el Senado aprobó el artículo 177 que restringe el uso de este mecanismo. Paradójicamente, según la demanda del Polo, en las conclusiones de la conciliación se introdujo una excepción a la norma que lo rehabilita.
Sumando los memoriales de los ‘verdes’ –que no tuvieron mayor eco- más el paquete de demandas del Polo y el criterio de la Unidad Nacional, no queda claro si en efecto hubo transparencia total durante la conciliación del Plan Nacional de Desarrollo que hoy defiende Martínez. En todo caso, una mayoría parlamentaria –sin incluir a la oposición- certifica su legalidad.