El exasesor presidencial peruano Vladimiro Montesinos rechazó hoy la decisión de la Fiscalía General de la Nación de llevarlo a juicio por haber intervenido en una operación de contrabando de miles de fusiles para las Farc.
En una audiencia virtual desde la base militar naval peruana de El Callao, donde está recluido, Montesinos aseguró al juez colombiano que deberá enjuiciarlo, que él ya fue condenado en su país por los mismos hechos.
La vista fue convocada por el Juzgado Penal del Circuito Especializado de Villaviencio, como preparatoria del juicio a Montesinos, quien fue acusado formalmente por la Fiscalía colombiana junto a otras 57 personas.
Además de Montesinos, los implicados son rusos, ucranianos, jordanos, libaneses, peruanos y un francoestadounidense, todos ellos por los delitos de tráfico, fabricación o porte de armas de uso privativo de las Fuerzas Militares, y concierto para delinquir.
Los cargos se derivaron de una operación de contrabando de armas para las Farc que, según la investigación, fue coordinada por Montesinos en 1999.
Por entonces, Montesinos ejercía como asesor de seguridad del presidente de su país, Alberto Fujimori (1990-2000), quien le confió el Servicio de Inteligencia Nacional (SIN) y con quien enfrentaría años más tarde causas judiciales que los tienen en prisión.
En su caso, el antiguo militar y abogado Montesinos ha sido condenado a penas de entre nueve y quince años por delitos como los de corrupción, tráfico de influencias, asociación ilícita y tráfico de armas.
La Fiscalía General precisó en un comunicado que, en la audiencia, el peruano dijo al juez de Villavicencio que, ante su desconocimiento de la legislación de Colombia, deseaba “ser representado por abogados colombianos”.
Asimismo “aseguró que rechazaría la intervención de la justicia colombiana, porque fue condenado por la Corte Superior de Lima a 20 años de prisión en el mismo caso”, agregó la misma fuente.
La vista fue suspendida “hasta nueva orden” por el titular del Juzgado Penal de Villavicencio, mientras recibe de las autoridades peruanas “copias de las sentencias condenatorias proferidas contra los procesados”.
Los documentos serán solicitados para establecer si es procedente la petición de Montesinos de no ser enjuiciado por este mismo caso.
Montesinos, por intermedio de unos emisarios suyos, se comprometió con las FARC a suministrarles 50.000 fusiles de fabricación jordana.
Los contrabandistas solo pudieron ingresar 10.000 fusiles, que fueron transportados en aeronaves rusas y lanzados en paracaídas sobre las selvas del Guainía, departamento fronterizo con Venezuela.