Dos soldados de la misión de la OTAN en Afganistán (ISAF) murieron hoy al estrellarse el helicóptero en el que viajaban en el este de Afganistán, informó en un comunicado la organización militar.
La ISAF precisó que la causa del siniestro está bajo “investigación” y, como es habitual, añadió que serán las autoridades del país o países de procedencia de los fallecidos quienes divulguen sus identidades.
Poco después de conocerse la noticia, un portavoz talibán aseguró mediante la red social Twitter que sus milicianos habían derribado un “helicóptero Chinook” de Estados Unidos y otro helicóptero de combate en un lapso de una hora en la oriental provincia de Logar.
“Han muerto 21 invasores, de acuerdo con nuestra información inicial. Un avión no tripulado bombardeó luego la zona y mató a dos muyahidines (combatientes). El enemigo ha acordonado la zona”, indicó el habitual portavoz de las acciones insurgentes Abdulqahar Balkhi.
Los talibanes suelen exagerar el alcance de sus propias acciones contra las tropas internacionales y el Ejército afgano, aunque las autoridades afganas habían informado de que Logar había sido escenario de intensas operaciones en los últimos días.
En total, de acuerdo con el portavoz provincial, Din Muhamad Darwish, han muerto 33 supuestos insurgentes en esas operaciones y otros 27 fueron detenidos.
Los talibanes luchan por la retirada inmediata de las tropas extranjeras desplegadas en Afganistán y la caída del actual Gobierno del presidente Hamid Karzai, con vistas a implantar un régimen fundamentalista islámico en el país asiático.