Estonia quedará inscrita en la historia de las Olimpiadas, al aportar las primeras trillizas a la maratón de la magna cita deportiva. Las atletas Leila, Liina y Lily Luik, nacieron en el país báltico hace 30 años, y correrán juntas en Río 2016. Desde ya, causan admiración por su belleza y carisma. Galería y video.
Las trillizas Luik empezaron en la natación y luego pasaron al atletismo. Ya corrieron juntas en el Europeo de Zúrich 2014 y suelen prepararse en Kenia. Su Federación logró incluir sus nombres en sus dorsales dutante Zúrich 2014, pero dado que el Comité Olímpico Internacional no lo acepta para Río de Janeiro 2016, habrá otros trucos para distinguirlas. Aunque todas visten Adidas y suelen competir con el mismo look (muy escandinavas) Liina acostumbra a dejarse el pelo largo y Lily gusta ponerse pendientes vistosos. “Está claro que a los aficionados les cuesta mucho diferenciarnos, pero nuestros familiares y amigos nunca se equivocan”, asegura Leila, única ausente, por lesión, en el Mundial de Pekín del año pasado.
Su popularidad en Estonia es elevada, de hecho, una iniciativa popular quiso que fueran designadas abanderadas, pero, dado su escaso palmarés, parece difícil que ese nombramiento llegue: la gloria del país, humilde (33 medallas en toda la historia), pasa por el judo, la lucha y, disciplinas atléticas técnicas, como el disco. “Nuestra posición y nuestro tiempo no es tan importante. Haremos todo lo posible para apoyarnos unas a otras en Río”, asegura Lily, conforme con la propia clasificación: “En realidad que estemos las tres en los Juegos es un milagro: la mínima era exigente y evitar los contratiempos es complicado”.