El municipio catalán de Sant Cugat del Vallès puso en marcha su primer semáforo en el suelo, una modalidad pionera en España, con el objetivo de reforzar la seguridad de los peatones que cruzan la calle mientras consultan su teléfono celular u otros dispositivos móviles.
Se trata de una franja de luces led de color rojo instalada en el suelo, por delante y detrás del semáforo tradicional, de la plaza Quatre Cantons y que se enciende cuando el otro prohíbe el paso. A diferencia de un semáforo clásico, estas luces quedan dentro del campo de visión de una persona con la cabeza agachada mientras consulta el teléfono. Así, se aumenta la prevención para evitar accidentes, como ya ocurre en otras ciudades europeas.
El Ayuntamiento ha instalado este dispositivo en uno de los semáforos de Sant Cugat que regulan una mayor afluencia de paso de peatones, ya que conecta la plaza a un paseo, pero también en una calle llena de vehículos. Ha costado 5.000 euros y, según fuentes municipales, “en un futuro se extenderá a otros semáforos”. La iniciativa ya se había implementado en un pueblo de Alemania.
*Con información de La Vanguardia