El Primer Ministro británico David Cameron, en un intento por calmar la ira pública sobre los detalles de las cuentas en Paraísos Fiscales, anunció ante el parlamento nuevas medidas para hacer que “el mundo sea más transparente”.
Dirigiéndose a los representantes de la Cámara, Cameron se comprometió a crear un grupo de trabajo para investigar más a fondo las revelaciones de los Panamá Papers y a impulsar nuevas leyes que permitan a las autoridades procesar a las empresas que facilitan la evasión de impuestos.
Además, anunció que la mayor parte de las dependencias del Reino Unido, incluyendo las Islas Vírgenes Británicas y las Islas Caimán, han acordado proporcionar acceso completo a la información sobre los beneficiarios finales de las empresas ‘Offshore’. La información se pondrá a disposición de las autoridades policiales y fiscales, pero no estará para el público.
“Creemos que ese es el camino correcto a seguir”, dijo el atribulado Cameron, y añadió que las dependencias del Reino Unido deben ser reconocidos por lo lejos que han ido en comparación con otras jurisdicciones secretas. “Estamos muy por delante de algunos estados de los Estados Unidos de América”, dijo.
Cameron, quien inicialmente negó la información sobre los fondos de inversión en alta mar de su padre, dijo la semana pasada que sí se había beneficiado con acciones del fondo de Blairmore de su padre, y que vendió su parte, meses antes de convertirse en Primer Ministro.
Como respuesta a las revelaciones los índices de aprobación hacia Cameron cayeron, según The Guardian, y en las calles manifestantes piden su renuncia.
En respuesta a la creciente presión pública para una mayor transparencia, Cameron publicó sus registros de impuestos personales y reveló que su madre había transferido 200 mil euros a sus cuentas, divididas en dos pagos para evitar posibles impuestos a la herencia.
En retrospectiva, dijo Cameron, ” Yo podría haber manejado esto mejor”.
“A medida que las revelaciones de los documentos de Panamá se han ido aclarando, tenemos que ir más allá”, dijo a los representantes de la Cámara. También felicitó a los periodistas que revelaron los arreglos corporativos logrando en la última semana “amargar la vida” de muchos políticos, entre ellos el Primer Ministro de Islandia, quien renunció después de darse a conocer la noticia sobre sus cuentas en Paraísos Fiscales, lo que incitó a protestas masivas en contra de él y su Gobierno.
Sin embargo, para Cameron no se han mermado las críticas, y argumentan que se necesita hacer más. “El Reino Unido está en el corazón de la industria mundial de la evasión de impuestos”, dijo el líder de la oposición Jeremy Corbyn. “Es un escándalo nacional, y que tiene que terminar”.
Siguiendo el ejemplo de Cameron, la canciller George Osborne, el líder de la oposición Jeremy Corbyn y el alcalde de Londres, Boris Johnson, también dieron a conocer sus propios registros de ingresos e impuestos. Corbyn pagó una multa a principios de este año por presentar su declaración de impuestos con una semana de retraso.