Noticias, Confidencial, Colombia, Cali, Medellin, En Boyacá el paro se salió de cotrol

Duitama sigue en toque de queda y militarizada. En Sogamoso no hay gasolina y en Tunja, aunque se tenía calculado que para este jueves las reservas estarían agotadas, el alcalde Pablo Cepeda anunció que ya hay reservas.

Luego de un martes de zozobra, en el que se accidentó el gobernador Carlos Amaya y un ciudadano falleció en confusos hechos en medio de las protestas en Duitama, el departamento de Boyacá, hoy miércoles, vive una tensa calma.

Habitantes de Tunja se han ido aprovisionando y algunos estantes de almacenes de cadena y expendios de verduras y frutas ya se ven vacíos, al tiempo que estudiantes de la Universidad Pedagógica y Tecnológica de Colombia (UPTC) marchan en Tunja, lo mismo que cientos de taxistas recorren las vías en caravanas. En ciudades como Duitama y Sogamoso no hay gasolina y en Tunja aunque se tenía calculado que para este jueves las reservas estarían agotadas, el alcalde Pablo Cepeda, anunció que ya hay reservas. Para este miércoles en la noche hay citado un ‘cacerolazo’.

En Duitama, punto neurálgico de las protestas en Boyacá toda vez que es la ciudad transportadora por excelencia de la región, se presentan protestas y bloqueos, por lo que una comisión del CTI y Medicina Legal tuvo que llegar en helicóptero con el fin de realizar las diligencias forenses sobre el cadáver de Luis Orlando Sáenz, muerto en las manifestaciones del martes.

En rueda de prensa, el subdirector de la Policía Nacional, general Ricardo Restrepo Londoño, informó que al departamento llegaron más refuerzos uniformados, por lo que se calcula que aproximadamente 3 mil policías hacen presencia, tanto en las carreteras, como en los cascos urbanos.

Añadió que en los días de protesta de los camioneros se han movilizado 1.350 carros de carga en 110 caravanas, las cuales han llevado víveres a las diferentes localidades, aunque regiones como el norte del departamento están sufriendo un serio desabastecimiento.

Por su parte, la mayoría de la clase política local ha siente “orfandad” y desconexión con el Gobierno nacional, lo mismo que los ciudadanos de a pie que consideran al presidente Juan Manuel Santos indiferente ante la situación y reclaman presencia y acción de parte de los congresistas oriundos del departamento.

Aunque las terminales de las principales ciudades del departamento no están despachando buses y las carreteras se ven semivacías, hacia el mediodía, voceros de la Gobernación manifestaron que llegaron a un acuerdo con los transportadores de Duitama que se comprometieron a levantar las barricadas y obstáculos de los sectores de Higueras, Ciudadela Industrial y salida hacia Santa Rosa de Viterbo, con el fin de normalizar el flujo vehicular en esta parte de Boyacá.

El mandatario de los boyacenses, luego de estar sedado debido al accidente, se comunicó hace unas horas con sus más cercanos colaboradores a quienes llamó a “seguir trabajando por el departamento”; y el parte médico, después de las cirugías faciales, de cadera y de húmero y tibia es satisfactorio.

Entretanto, el secretario privado de la Gobernación, Wilmer Leal, se pronunció llamando a la calma y a la tranquilidad.