El abanderado republicano Donald Trump constituye una amenaza para el país que su propio partido debería reconocer, publicó The Washington Post.
En su editorial principal de este lunes, el periódico indicó que si esta elección es una de las menos favorecidas registrada hasta el momento, no se debe al hecho de que tanto el Partido Demócrata o Republicano escogieron malos candidatos, sino a la presencia del millonario de bienes raíces en la puja por la presidencia de EEUU.
El diario consideró que a pesar de la pobre calidad de los dos principales candidatos presidenciales, existen diferentes caras de la moneda, pero sobre todo de caracteres que no deben ser pasadas por alto.
“La señora Clinton es una política de larga data en la arena a quién uno quizá apoye o no. El señor Trump es un peligro para la república”, apuntó The Washington Post por las falencias que tendría el candidato. Recordó que no tiene experiencia como servidor público “y su record privado de bancarrotas y explotación deberían descalificarlo. Con frecuencia circula falsedades y no tiene un discernible interés o conocimiento de política”.
El Post argumentó con la gran carrera de Clinton desde sus días como primera dama hasta su gestión como Secretaria de Estado y su paso como senadora por Nueva York, que si bien su labor ha sido reconocida, “nada de esto quiere decir que tiene que gustar o que creamos que sería una buena presidenta”.
“Se puede creer que fue ingenua por empujar la intervención en Libia, arrogante por mantener sus correos fuera del servidor del Departamento de Estado, codiciosa por tomar enormes pagos por hablar como ciudadana privada, pero comparada con otros candidatos… ella no es una basura de candidato”, señaló desmeritando las ideales que Trump está dispuesto establecer.
El diario también acusó a Trump de realizar una campaña basada en intolerancia, ignorancia y resentimiento, consideró que aquellos republicanos que mortificados por quien su partido nominará como abanderado presidencial, mantendrán la esperanza de una transformación mágica en la retórica, “algo que no debería ser problema para un hombre que no tiene creencias firmes”.
Finalizando su artículo el Post señala que la realidad continúa siendo otra y nada podrá cambiar el hecho de que Trump “sería un candidato que saltó a la prominencia política con ataques raciales en contra del actual presidente y lanzó su campaña llamando a los mexicanos violadores” desaprobando el instaurarse como uno de los favoritos en las elecciones a base de argumentos violentos.