El presidente de EE.UU., Barack Obama, visitará hoy el estado de Nueva Jersey, convertido en “zona cero” del ciclón “Sandy” después de que el lunes éste dejase una estela de muertes y destrucción a su paso por la costa Este del país.
El mandatario estadounidense se reunirá esta tarde con damnificados por la “supertormenta” e inspeccionará los daños en las zonas impactadas junto con el gobernador republicano de Nueva Jersey, Chris Christie, anunció el martes la Casa Blanca.
Obama también agradecerá a los equipos de emergencia “que arriesgan sus vidas para proteger a sus comunidades”, añadió la Casa Blanca.
Christie, un férreo crítico del mandatario que hace apenas un mes le aconsejó que se subiera a un avión y regresara a Chicago, su ciudad adoptiva, elogió el martes la respuesta de su Administración a la tormenta, que sólo en Nueva Jersey dejó a unas 2,4 millones de personas sin suministro eléctrico y extensos daños al sector turístico.
“El nivel de devastación en las costas de (Nueva) Jersey es impensable”, dijo Christie, al describir las imágenes de destrucción causada por “Sandy”.
Obama, que canceló actos electorales en tres días consecutivos, incluyendo un viaje previsto para hoy al estado clave de Ohio, visitará Nueva Jersey a seis días de los comicios generales del próximo 6 de noviembre.
La campaña de su rival republicano, Mitt Romney, no ha dicho si éste tiene planes de visitar las zonas impactadas por “Sandy”.
En un acto electoral en Kettering (Ohio) el martes, en el que voluntarios recababan alimentos enlatados para los damnificados, Romney expresó solidaridad ante “todo el sufrimiento que está pasando una gran parte de nuestro país”.
En 2005, el entonces presidente republicano, George W. Bush, fue fuertemente criticado por la lenta respuesta de su Gobierno al huracán “Katrina”, que anegó la ciudad de Nueva Orleans (Luisiana) y se situó entre los más costosos de la historia de Estados Unidos.
Durante una visita no anunciada a la sede de la Cruz Roja en Washington, Obama calificó el martes de “desgarradora” la tormenta “Sandy”, y advirtió de que aún hay riesgo de inundaciones y derrumbe del tendido eléctrico.
Asimismo, el mandatario dijo que “no hay excusa para la inacción”, por lo que instó a las autoridades a continuar coordinando la respuesta a la tormenta.
A petición de los gobernadores, Obama declaró los estados de Nueva Jersey y Nueva York como zonas de desastre, algo inusitado porque normalmente las autoridades primero evalúan los daños causados por desastres naturales.
La declaración de desastre permite que ambos estados soliciten de inmediato fondos del Gobierno federal para tareas de limpieza y reconstrucción, vivienda temporal, préstamos con bajas tasas de interés para daños no cubiertos por las aseguradoras, y otros programas de ayuda para individuos y empresarios.
En el caso de Nueva York, la decisión de Obama permitirá la entrega de fondos a damnificados en los condados del Bronx, Kings, Nassau, New York, Richmond, Suffolk y Queens.
En el caso de Nueva Jersey, la ayuda estará disponible para los residentes en los condados de Atlantic, Cape May, Essex, Hudson, Middlesex, Monmouth, Ocean y Union.
Según las autoridades, unos ocho millones de personas en unos 15 estados afectados por “Sandy” permanecían sin servicios de luz la noche del martes.