Por medio de un comunicado la Misión de las Naciones Unidas en Colombia se refirió a las recientes denuncias sobre el asesinato de líderes sociales y políticos en zonas de conflicto y manifestó su preocupación por estos hechos violentos en medio de las negociaciones de paz.
Según la ONU, estos hechos disminuyen la confianza construida a lo largo de las negociaciones de paz entre el Gobierno y las Farc.
“Las Naciones Unidas entienden el temor de las organizaciones sociales afectadas y su reclamo para que se tomen urgentemente las medidas necesarias para evitar el recrudecimiento de la violencia, que socava la confianza en las perspectivas de una paz estable y duradera, ante la expectativa de la firma del Acuerdo Final entre el Gobierno de Colombia y las FARC-EP”, expresa la comunicación emitida por la ONU.
En el documento, la ONU celebró que el presidente Juan Manuel Santos haya convocado a una reunión de última hora para fija una línea de investigación que permita esclarecer lo sucedido y exigió resultados a las indagaciones que se adelanten al respecto.
“Apoyamos la determinación del Presidente Juan Manuel Santos de convocar una reunión de alto nivel de la Comisión Nacional de Derechos Humanos y la decisión del Fiscal General de adelantar las investigaciones sobre los últimos hechos presentados”, dijo la ONU.
“Esperamos que la celeridad en las investigaciones, como lo ha solicitado la Defensoría del Pueblo, y las medidas que puedan tomar los diferentes organismos del Estado, contribuyan a la protección de la población civil y a generar mayor tranquilidad en las comunidades” agregó.
Según información extraoficial, la tarde de este lunes el máximo líder las FARC, Rodrigo Londoño, alias ‘Timochenko’ sostendrá reunión con la Misión de Naciones Unidas en Bogotá. Previo a la firma del nuevo acuerdo que está prevista para mañana martes. Aún el gobierno no confirma si el evento se realizará en Bogotá o en Santa Marta.
Este es el texto completo de comunicado emitido por la ONU:
Comunicado de la ONU en Colombia sobre violencia y asesinatos en zonas afectadas por el conflicto
El Equipo de País y la Misión de las Naciones Unidas en Colombia manifiestan su preocupación por acciones violentas, incluyendo recientes asesinatos, dirigidos a líderes sociales en varias zonas del país afectadas por el conflicto armado.
Las Naciones Unidas entienden el temor de las organizaciones sociales afectadas y su reclamo para que se tomen urgentemente las medidas necesarias para evitar el recrudecimiento de la violencia, que socava la confianza en las perspectivas de una paz estable y duradera, ante la expectativa de la firma del Acuerdo Final entre el Gobierno de Colombia y las FARC-EP.
Apoyamos la determinación del Presidente Juan Manuel Santos de convocar una reunión de alto nivel de la Comisión Nacional de Derechos Humanos y la decisión del Fiscal General de adelantar las investigaciones sobre los últimos hechos presentados.
Esperamos que la celeridad en las investigaciones, como lo ha solicitado la Defensoría del Pueblo, y las medidas que puedan tomar los diferentes organismos del Estado, contribuyan a la protección de la población civil y a generar mayor tranquilidad en las comunidades.
El Acuerdo Final de Paz prevé la implementación de varias medidas dirigidas precisamente a garantizar la seguridad de líderes y lideresas de organizaciones sociales y defensores de derechos humanos, así como la seguridad para el ejercicio de la política, en particular mediante la instalación de la Comisión Nacional de Garantías de Seguridad.
En este momento la Oficina del Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Derechos Humanos se encuentra adelantando una serie de misiones de verificación en terreno, tras lo cual se informará a la opinión pública de los resultados de las mismas.
Las Agencias, Fondos y Programas de las Naciones Unidas así como la Misión de la ONU en Colombia reiteran su compromiso con la protección de la población civil, así como, en el marco de sus respectivos mandatos, su continuo acompañamiento a los esfuerzos de construcción de paz y respuesta a las expectativas de la población colombiana, particularmente, en los territorios más afectados por el conflicto.