Ópera Salomé “será un hecho histórico en Bogotá”, Caballé

Salomé, la controvertida, escandalosa y sensual ópera de Richard Strauss, se estrena por primera vez en nuestro país. Confidencial Colombia habló con el director musical Josep Caballé Domenech sobre su trabajo con la Filarmónica de Bogotá, los retos que representó para la orquesta tocar por primera vez esta pieza y el proceso creativo.

Con más de cien años de historia, Salomé, uno de los personajes más escandalosos del cambio del siglo, llega a Colombia por primera vez con la producción del Teatro Mayor Julio Mario Santo Domingo, quienes vuelven a apostarle a la realización de producciones líricas de gran formato como ya hizo con Carmina Burana y Orfeo. La Orquesta Filarmónica de Bogotá será la encargada de interpretar, también por primera vez, la música de Strauss.

La tragedia escrita en 1891 por el escritor inglés Oscar Wild, muestra una visión muy personal de la historia bíblica de Salomé. Fue censurada por su alto contenido erótico y fue llevada a las tablas por primera vez en 1903, en Berlín, luego de ser prohibida en Viena. Richard Strauss asistió al estreno y quedó tan impactado con la historia que decidió crear una ópera basada en el libreto de Wilde. El resultado fue una obra dramática fascinante, en la que se conjugan una gran música, una gran historia y un texto sublime.

Esta ópera, bajo la dirección escénica de Joan Anton Rechi, uno de los más importantes directores de ópera de Europa; y con la dirección musical de Josep Caballé Domenech, actual director titular de la Colorado Springs Philharmonic, llega con una versión moderna pero a la vez fiel a la historia, recreando la atmósfera dorada, lujosa y opulenta de los palacios de los jeques árabes.

Confidencial Colombia habló con Caballé Domenech sobre su trabajo con la Orquesta Filarmónica de Bogotá, los retos que representó para la orquesta tocar por primera vez esta pieza y el proceso creativo.

Josep Caballé Domenech nació en una familia de músicos. Su madre violinista de la Orquesta de Barcelona y su padre clarinetista, le transmitieron el gusto por la música. Tanto Domenech como su hermano iniciaron a muy temprana edad estudios musicales conociendo instrumentos como el piano, el violín y percusión.

El sonido orquestal siempre fue su pasión. A los 17 años empezó a trabajar profesionalmente para una orquesta y según comenta, desde allí comenzó su curiosidad y estudios como director, observando las partituras de toda la orquesta y viendo en detalle el trabajo de cada uno de los directores que semana a semana llegaba a dirigir.

Su primer trabajo como director, lo recuerda con total claridad y emoción. “Fue en 1999 en Praga con la Orquesta de la Radio Checa, cuarta de Mendelssohn, concierto de Camille Saint Saens Cello y Las Hébridas de Mendelssohn, ese es el que se considera como mi primer concierto en mi carrera profesional y desde entonces soy un afortunado. He podido hacer esto durante 20 años casi. Es una profesión dura pero muy apasionante”, manifiesta.

Ha dirigido una larga lista de orquestas internacionales como la Royal Philharmonic de Londres, con quien grabó la trilogía de Respighi para el sello Onyx Classics, la Tonhalle de Zúrich, la WDR de Colonia, la Filarmónica Checa y la New Japan Philharmonic, entre otras. Actualmente es director titular de la Colorado Springs Philharmonic y Director Musical General de la Staatskapelle Halle, a cargo de la Orquesta Filarmónica y del Teatro de Ópera. En su carrera combina el repertorio sinfónico y operístico.

El año pasado vino al festival Bogotá es Mozart con su orquesta alemana haciendo el concierto de cierre del evento, lo que lo llevó a ser invitado para la dirigir la versión de Salomé, que estará en el Teatro Mayor Julio Mario Santo Domingo el martes 16, jueves 18 y sábado 20 de febrero de 2016, a las 8:00 p.m.

Confidencial Colombia: ¿Qué retos presenta Salomé teniendo en cuenta que la Orquesta Filarmónica de Colombia no ha tocada la obra de Richard Strauss?

Josep Caballé Domenech: Salomé es una de las obras más complicadas y más emblemáticas de Richard Strauss y del siglo XX. Los retos que una obra de estas características implican es evidentemente una gran concentración. Técnicamente es una obra intocable y cuenta con una orquesta de más de 100 músicos en foso.

Tener una masa de orquesta tan grande acompañando una sola cantante, eso crea muchos problemas a niveles acústicos, además de hablar de una orquesta que nunca ha tocado la obra antes y que tampoco toca siempre en foso.

Esas tres cosas son retos muy importantes. Pero yo creo que con una buena planificación se puedo arreglar. Realmente en los ensayos nos ha ido muy bien. Tengo que decir que estoy gratamente sorprendido porque la Orquesta ha funcionado de forma impresionante. Están sonando…que uno no se lo cree (Risas).

Confidencial Colombia: Desde que le hicieron la invitación, ¿cómo fue el proceso de preparación y cuánto tiempo duro?

Josep Caballé Domenech: Una vez recibida la invitación, lo primero que hice fue ponerme en contacto con el director de escena Joan Anton Rechi. Yo sabía de él y el sabia de mí pero no nos habíamos conocido anteriormente. Nos encontramos un par de veces en Barcelona para discutir el proyecto cuando estaba todo muy sobre el papel.

A partir de ahí entre los dos empezamos a trabajar en la búsqueda de los papeles, los cantantes necesarios. Cuando ingrese al proyecto ya se sabía quién interpretaría Salomé pero el resto de papeles no. Fue un proceso bastante largo, hasta casi diciembre del año pasado todavía había un par de papales que no sabíamos quién los iba a hacer.

En septiembre hicimos audiciones con los cantantes colombianos para ver quién podría participar en este proyecto. En diciembre hicimos unos ensayos con la orquesta y desde hace dos semanas estamos a full.

Confidencial Colombia: ¿Qué opinión tiene sobre la intérprete de Salomé?

Josep Caballé Domenech: Lo primero que puedo decir es que tenemos la suerte, sin lugar a dudas, de tener posiblemente el mejor casting para Salomé hoy en día.

Gun- Brit Barkmin cantó este papel en Viena hace tres semanas y lo ha cantado en muchos sitios. Contamos con cuatro principales de lo mejor que hay en el mercado y hemos tenido suerte de que estén libres para venir aquí. Una de las dificultades que eso representa es poner el resto de los cantantes a ese nivel. Tenemos un casting muy homogéneo, tenemos gente colombiana de primer orden como Valeriano, Cesar Gutiérrez y un par de gente de afuera.

Evidentemente es una actriz con una gran personalidad, con una voz exquisita para este tipo de rol que es tan difícil. Es un rol que se tiene que vivir. Cuando un artista de este calibre vive ese rol, le da unas connotaciones que nadie más le puede dar. Ella, para mí lo que está haciendo es fantástico, tiene la voz perfecta para hacer esto y realmente le da el color que ella quiere.

Confidencial Colombia: ¿Qué opina de modernizar y hacer de una obra clásica algo contemporáneo, evidente en la puesta en escena y licencia que con más amplitud tienen los directores escénicos?

Josep Caballé Domenech:Yo no diría que los directores de escenografía cambian las cosas por cambiarlas o por hacerlas más contemporáneas, yo creo que eso es una banalización de su trabajo que no se adecua a la realidad. Como artistas, miramos de otra forma y toman nuestras propias decisiones para que eso sea coherente. Las personas pueden estar de acuerdo o no pero yo creo que ese es nuestro trabajo, la recreación de algo que está sobre el papel, que está muerto. Una partitura está muerta

Desde mi punto de vista musical la recreación me da mucho juego porque evidentemente yo no puedo hacer las obras con cantantes distintos, cada cantante a mí me aporta, es un trabajo en equipo y ahí está la grandeza del arte en general y sobre todo cuando te enfrentas a una obra magistral como Salomé.

Confidencial Colombia: ¿Qué diferencia hay entre dirigir música orquestral y dirigir opera?

Josep Caballé Domenech: Hay diferencias importantes. Yo por eso el cincuenta por ciento de mi tiempo hago sinfónica y el otro cincuenta por ciento opera. Creo que las dos son complementarias, distintas pero complementarias. Mi credo es que yo intento dirigir una orquesta sinfónica con la flexibilidad que ofrece una orquesta de ópera, e intento dirigir una orquesta de opera con el rigor o mejor, la presencia orquestral que da la sinfónica. Creo que esa amalgama funciona muy bien.

El sistema de trabajo cambia. En conciertos sinfónicos tienes entre uno a tres ensayo, en una semana haces un concierto o tres y te vas. En opera son muchos más ensayos, está la orquesta, conjuntos, los periodos son bastante distintos.

Confidencial Colombia: ¿Comparativamente cómo ve el trabajo orquestal de nuestro país respecto al de otros?

Josep Caballé Domenech: Yo creo que tenemos la suerte de trabajar con un lenguaje que es universal. No hay ninguna orquesta que sea solamente de gente de esa ciudad o de ese país, con lo cual hoy en día las orquestas son muy mixtas con músicos rusos, búlgaros, americanos, latinoamericanos, etc. Hoy en día el trabajo es similar en todas partes, muchas veces tiene que enfocarlo de una manera distinta pero en general no le veo diferencia.

Confidencial Colombia: ¿Qué visión podría darle a esta obra para intentar acercarla a nuevas audiencias?

Josep Caballé Domenech: Yo no creo que tenga que hacer algo para acercar esta obra a nuevas audiencias, creo que son las nuevas audiencias las que tienen que hacer su trabajo para acercarse a esta ópera. Dicho así puede sonar un poco brusco, un poco duro pero creo que entendéis a lo que me refiero. Yo como artista no voy a hacer nada, ni para las nuevas audiencias, ni para esta orquesta, ni para los cantantes, para que a una persona le guste más o le guste menos. Yo voy a hacer la obra.

Creo que tiene que haber un trabajo de educación, que empieza en la escuela, pero incluso se vuelve una educación personal, para que la gente se acerque y empiece a entender. Yo siempre digo ¡Nosotros tenemos que presentar las cosas como son! Siento que es más un trabajo de educación, que empieza con el interés y con el marketing. El público que nunca han asistido a una función, se siente atraído o no. Creo que se sienten atraídos cuando es un producto lógico, un producto en el que estas dejando la piel.

Estoy seguro que este trabajo le va a llegar a la gente. Se estrena por primera vez aquí y evidentemente el poder que tiene esta presentación va a marcar un antes y un después en Bogotá. Estamos hablando de una de las obras más interesantes de todo el repertorio operístico, que hace más de cien años se escribió y que todavía no se ha hecho aquí en Colombia, con lo cual es casi una cuestión histórica.

Yo creo que el propio texto de Oscar Wild es tenso, es una obra arrolladora. La obra es salvaje, el texto es salvaje, es una obra difícil para todos pero ese es uno de los juegos de Strauss. Es una obra que no te permite pensar, es una obra que no te permite, hasta me atrevería a decirlo, disfrutarla porque es un torbellino que te lleva.

Únicas funciones martes 16, jueves 18 y sábado 20 de febrero de 2016, 8:00 p.m. Entradas desde $35.000