La petrolera confirmó que existen discusiones con partes interesadas relacionadas con su proceso de restructuración de deuda. Según Wall Street Journal, se estudian seis ofertas de compra.
En una publicación Wall Street Journal (WSJ), afirmó que la junta directiva de Pacific E&P “está estudiando seis ofertas de compra para evitar acogerse a la protección por bancarrota”.
De acuerdo con el medio internacional, “Las ofertas finales, que incluyen una compra por parte del equipo gerencial y hasta US$500 millones en préstamos, se debieron presentar el miércoles y se espera que la junta directiva tome una decisión para el final de esta semana, según las fuentes. En los últimos dos años, el precio de las acciones de la empresa con sede en Bogotá se desplomó más de 95%, conforme una caída de los ingresos petroleros dejó al descubierto compras de activos inoportunas”.
En el informe también señaló que las ofertas están siendo recibidas por Lazard, y que hasta ahora la única oferta que se ha hecho pública es la de la firma de inversión en energía EIG.
Pacific confirmó la publicación
A través de un comunicado la compañía anunció que conoce los reportes hechos a través de medios de comunicación relacionados con el proceso de restructuración de la deuda que está en curso, y afirmó que “aunque la compañía no se pronuncia sobre rumores de mercado, confirma que continúa estando en conversaciones con todas las partes interesadas para fortalecer la estructura de capital de la compañía y que esté mejor adaptada a las actuales condiciones del mercado”.
Como parte de esas conversaciones, la compañía y sus asesores están evaluando varias propuestas. “Este es un proceso que está en curso y no se ha fijado un cronograma definitivo para la aceptación de propuestas, las cuales están sujetas a confidencialidad. No existe garantía de alguna de las propuestas sea aceptada o implementada”, agrega.
“La compañía revelará información relevante de manera oportuna y de conformidad con las leyes de mercado público de valores aplicables”, concluye el comunicado.
La mala hora
Recordemos que en enero la firma internacional calificadora de riesgos Standard & Poor’s le puso a la petrolera la peor calificación crediticia posible: D, y hasta esa fecha la empresa no había podido cumplir con el pago de 31,3 millones de dólares de interés sobre sus pagarés.