Solo el 40.7% del censo electoral sufragó este pasado domingo 25 de mayo para elegir presidente de la República. Los datos no son nada alentadores ya que el porcentaje de abstención deja claro que solo 13 millones de colombianos ejercieron su derecho a votar. Esta situación podría no cambiar para la segunda vuelta.
Cuando en las pasadas elecciones presidenciales chilenas en las que Michelle Bachelet llegó por segunda vez a la presidencia se presentó un porcentaje de abstención cercano al 50% varios analistas cuestionaron la legitimidad de esta elección. Un comportamiento que generó sorpresa en un país que regresó a la democracia hace menos de tres décadas.
En Venezuela el porcentaje de participación electoral es cercano al 80%. A pesar de ello en muchos círculos se le considera un país bastante alejado de la democracia.
Por su parte Colombia, que se precia de ser la democracia más estable y antigua de Latinoamérica presentó en las elecciones de este domingo 25 de mayo un porcentaje de abstención del 60%. Estas cifras no dejan bien parado al sistema político colombiano.
Las razones de la abstención, que ha sido histórica, rozando el 50%, son variadas, pero el poco atractivo de las propuestas de los candidatos de la presente elección, que hicieron los debates pertinentes faltando menos de una semana para la jornada electoral, fue decisivo para que más de la mitad del censo electoral no acudiera a las urnas.
Un ejemplo que puede poner en perspectiva la dramática situación es que en la Costa Atlántica solo votaron una de cada cuatro personas habilitadas para votar. Magdalena tuvo una abstención del 70 % y Bolívar del 73%. Esto quiere decir que 20 millones de colombianos, de los 33 millones habilitados, no sufragaron.
El panorama no es alentador para la segunda vuelta del próximo 15 de junio, toda vez que los candidatos que tienen polarizado al país, Juan Manuel Santos y Óscar Iván Zuluaga, no terminan de convencer más allá de unas conveniencias políticas y personales. Además, los comicios se llevarán a cabo un día después del primer partido de la Selección Colombia en el mundial de Brasil 2014. El certamen deportivo puede generar que muchos de sus espectadores prefieran dedicarse a un domingo deportivo que salir a participar en las elecciones.
En estas elecciones no ganó la abstención, perdió la democracia colombiana en la medida en que el triunfo en primera vuelta de Óscar Iván Zuluaga solo representa al 12% de la población total de Colombia y un escaso 29% del censo electoral.
El porcentaje de la abstención más alto en los últimos 12 años supone un reto para los candidatos que se presentan a la segunda vuelta en las elecciones presidenciales de este año y para los que se presenten a alguna jornada electoral futura.