¿Por qué el Estado Islámico es más sanguinario que Al-Qaeda?

De acuerdo a los datos, la capacidad para atentar del Estado Islámico es mucho mayor que la del grupo terrorista Al-Qaeda.

La nueva amenaza mundial, el grupo terrorista Estado Islámico (EI), es un ejemplo del hermano pequeño que supera al primogénito. En su día, fue un grupúsculo perteneciente a Al-Qaeda, pero desde que en abril de 2013 comenzaron las disputas más serias con el ‘hermano mayor’ a raíz del papel que la incipiente organización debía jugar en Siria, el grupo terrorista EI ha perpetrado más de 1.600 atentados. De esta forma, ha igualado en solo tres años el número de ataques ejectuados por Al-Qaeda en 15, según el análisis realizado por este diario de las bases de datos de Global Terrorism Database y del International Institute for Counter-Terrorism.

Desde abril de 2013, el grupo terrorista EI ha perpetrado un total de 1.658 atentados. Los datos muestran que la organizacón terrorista es mucho más ágil y dinámica que Al-Qaeda a la hora de planear y llevar a cabo un ataque terrorista.

El modus operandi del EI también difiere en los objetivos contra los que ha perpetrado ataques. Un 42% de los atentados que ha ejecutado ha sido dirigido contra ciudadanos de a pie. Una estrategia seguida en los atentados de París del pasado viernes cuyo único objetivo es sembrar el terror.

De esta forma, cuatro de cada 10 ataques del Estado Islámico tenían como objetivo a civiles. En cambio, Al-Qaeda ha desarrollado desde comienzos de este siglo una guerra del terror un tanto diferente, ya que un 47% de los atentados perpretados por la organización, liderada en su día por Osama Bin Laden, se relacionan con objetivos militares o policiales. Bien es cierto que su ataque más reconocido contra las Torres Gemelas de Nueva York, el 11 de septiembre de 2001, solo buscaba, además del valor simbólico, acabar con la vida de miles de personas.

Aun así, el EI no se ha olvidado de las bases militares y policiales. Un tercio de los atentados que ha llevado a cabo desde su conformación se corresponde con objetivos militares.

Esta facilidad de acometida ha provocado que el EI iguale los asesinatos cometidos por Al-Qaeda, grupo terrorista del que una vez formara parte, en tan solo tres años. A falta de confirmación de la autoría de un buen número de atentados en el año 2015, y según los datos de Global Terrorism Database actualizados a 2015 tras el análisis realizado por este diario, el EI ha asesinado a más de 15.000 personas. Al-Qaeda ha perpetrado una matanza similar pero en un periodo de tiempo más largo, desde el año 2000.

Como muestran estos datos, y aunque el atentado de las Torres Gemelas, en el que murieron 3.000 personas, quedará siempre en la memoria colectiva del mundo, lo cierto es que en los últimos años, y en especial tras la muerte de Osama Bin Laden, Al-Qaeda ha perdido fuerza como amenaza internacional. De hecho, en la actualidad la mayoría de sus acciones se concentran en Yemen, uno de sus últimos bastiones de reclutamiento y alistamiento.

De acuerdo a los datos, los núcleos de acción de ambos grupos terroristas son, a día de hoy, muy diferentes. Aunque Paris es la ciudad donde se han producido los últimos ataques, la base de acción del EI se centra en Irak, ya que entre 2013 y 2014 perpetró un total de 1.438 atentados. El segundo país con más actividades es Siria, con 142 ataques.

Por su parte, y de acuerdo a los ataques ejecutados en los dos últimos años, Al-Qaeda mantiene su último reducto de terror en Yemen, donde ha ejecutado 426 atentados en dos años. En Irak, y como muestran los 80 ataques perpetrados, sus militantes han sido absorbidos o desplazados por el Estado Islámico.