El cierre del primer trimestre de 2013 muestra la preocupante tendencia de caída en la industria manufacturera que comenzó a agudizarse desde los inicios de 2012. Los industriales colombianos reportan decrecimientos en producción y ventas con el agravante que el clima de negocios no mejora.
Otro factor a tener en cuenta es la menor utilización de la capacidad instalada de las empresas, la cual está en bajos niveles, d igual forma disminuyen de manera apremiante los pedidos a la industria.
El análisis que hacen los empresarios a través de la Encuesta de Opinión Industrial Conjunta, independiente de los líos del sector industrial, hay efectos en la dinámica productiva que desprenden del paro cafetero y los menores días hábiles en marzo por la Semana Santa.
En medio de la situación, los empresarios confían en una pronta recuperación y por ello le apuestan a una inversión productiva de gran dinámica. Según la encuesta, el 50 por ciento de los empresarios consultados tiene dentro de sus planes el desarrollo de planes de inversión. Hace un año la encuesta arrojaba con esa intensión a un 60 por ciento de las factorías.
“Pese a la difícil coyuntura, esperamos que, a partir del segundo trimestre del año, se empiecen a percibir algunos síntomas de recuperación. En esta dirección estaría el impacto del Programa de Impulso a la Productividad y el Empleo, el cual en gran medida coincide con lo propuesto por la ANDI en la Agenda para el Salto en Competitividad. Para ello es necesario que estas medidas sectoriales, tributarias, arancelarias, cambiarias y de energía, anunciadas por el gobierno, se ejecuten con celeridad, permitiendo así recuperar la senda de crecimiento competitivo”, consideró la Asociación Nacional de Industriales (ANDI).
Según el gremio de los empresarios, se hace importante que el Gobierno no deje de lado aquellas medidas que aún están pendientes. “Estamos hablando de reglamentar y bajar las tarifas de la retención en la fuente del impuesto de renta, reglamentar el tratamiento del IVA en los bienes de capital, eliminar la sobretasa a la energía que es comprada en bloque en las zonas francas y crear mecanismos más expeditos de salvaguardias y antidumping”.
Para la ANDI es determinante seguir trabajando en temas de largo plazo y cuya ejecución no da espera, como educación, innovación, ciencia y tecnología, mercado de capitales, infraestructura y fortalecimiento institucional, entre otros.
Producción y ventas van mal
La Encuesta de Opinión Industrial Conjunta (EOIC), que desarrolla la ANDI en asocio de ACICAM, Acoplásticos, Andigraf, Anfalit, Camacol y la Cámara Colombiana del Libro se evidencia el precario primer trimestre de 2013. Al hacer la comparación con igual periodo de 2012, la producción disminuyó e menos 3.0 por ciento, las ventas totales decrecieron -1.9 por ciento y las del mercado interno cayeron -2.2 por ciento.
Al revisar el cuadro de los sectores, este parece una libreta de un pésimo estudiante al ver la cantidad de cifras en rojo. Es así como muestran caídas importantes 10 de los 14 sectores analizados.
Los de mayor caída son hiladura, tejedura y acabados con -23.6 por ciento, le siguen Autopartes para vehículos con -19.2 por ciento, calzado con -13.4 por ciento, siderúrgica, hierro y acero con -11.8 por ciento y vehículos automotores con -9.9 por ciento. No le va bien de igual manera a alimentos, papel cartón, sustancias químicas básicas y productos minerales no metálicos.
Al mirar el ítem de capacidad instalada, el asunto preocupa toda vez que este es el indicador más confiable de producción. En marzo anterior este indicador se ubicó en el 74.8 por ciento, reportando un nivel por debajo del registro histórico el cual está en 76.4 por ciento.
El promedio del trimestre en utilización de la capacidad instalada fue de 74.5 por ciento, frente a 78 por ciento en el trimestre anterior y 76.4 por ciento en igual trimestre de 2012.
No menos apremiantes son los indicadores de demanda, es decir la ecuación entre inventarios y pedidos por cuanto muestran una tendencia decreciente en los últimos 15 meses. “En marzo de 2013, el 80 por ciento de la producción calificó sus pedidos como altos o normales, frente a un indicador del 91.9 por ciento hace un año. Por su parte, el porcentaje de la producción que reportó sus inventarios como altos fue de 20.4 por ciento”.
Dadas las circunstancias, el actual momento es adverso en materia de percepción de los industriales sobre el clima de los negocios. En marzo pasado el 52.6 por ciento de los encuestados calificó la situación de la empresa como buena, nivel diecisiete puntos por debajo del reportado en igual período del año anterior que fue de 70.3 por ciento. Las mejores expectativas son reportadas por el 40.1 por ciento de las empresas.
“Los principales obstáculos que perciben los empresarios en el desarrollo normal de su actividad son en su orden: baja demanda, alta competencia en el mercado, tipo de cambio, costo y suministro de materias primas, contrabando y competencia desleal, bajos márgenes de rentabilidad, rotación de la cartera, capital de trabajo, entre otros”, dicen los empresarios.
Según las factorías, los principales obstáculos para realizar sus proyectos son financiación, inestabilidad del mercado, trámites y reglamentación. También identificaron como dificultad lo concerniente a impuestos y costos logísticos, capital de trabajo, rentabilidad, incertidumbre política, factores tecnológicos y costo financiero.
