El Paris Saint Germain pasó por encima del Troyes AC (0-9) y se convirtió en el campeón de la Liga de Francia a ocho jornadas del final. El equipo de Blanc demostró su inmensa superioridad con cuatro goles de Ibrahimovic.
El festival del campeón arrancó antes del cuarto de hora, con el tanto anotado por el uruguayo Edinson Cavani al minuto 13. Cuatro después amplió el marcador el argentino Javier Pastore y dos más tarde anotó el tercero Adrien Rabiot. Tras el descanso fue Zlatan Ibrahimovic quiwn acaparó el protagonismo.
El sueco hizo un triplete en diez minutos para elevar a 26 goles su cuenta anotadora en la Liga. Un autogol de Saunier Mathieu fue el séptimo y Cavani, en el 75, aprovechó el rechace tras el fallo de una penalti que él mismo lanzó para firmar el octavo y el segundo en su cuenta. Un minuto antes el Troyes perdió por doble tarjeta amarilla a Karabouse Losse. Jugó el último cuarto de hora con diez hombres.
El cierre lo echó Ibrahimovic, que marcó el noveno. El cuarto en su cifra, para elevar a 27 su registro en el curso. El conjunto de Blanc une este título a los logrados anteriormente por la entidad parisina en los años 1985-86, 1993-94, 2012-13, 2013-14 y 2014-15.
Los números del equipo del jeque son asombrosos. 24 victorias, cinco empates y una sola derrota en todo el campeonato. Aventaja en 25 puntos al Mónaco, que es el primero de los normales en el campeonato galo. La constelación parisina no tiene parangón en el campeonato local. Es su sexto título, aunque si en el futuro no cambian las cosas radicalmente en la composición de la liga francesa es previsible que los parisinos estén inmersos en una racha histórica. Cada año gana con más autoridad.
El gran reto que les queda por delante es demostrar que un equipo francés también puede ser importante en Europa. El Olympique de Marsella es el único equipo galo que ha reinado en el continente, lo hizo en 1993 y sobre aquel conjunto pesa la sospecha de la compra de partidos. Ahora Ibrahimovic, Di María, Cavani, Pastore o Lucas Moura quieren también revertir la historia.