¿Qué falta para que se firme el acuerdo de paz?

El español, Enrique Santiago Romero, abogado y asesor jurídico de las FARC, despejó dudas sobre las conversaciones de paz que están ad portas de finalizar, para abrirle la puerta al posconflicto. El jurista habló sobre lo que falta por acordar y el interés del grupo insurgente de firmar un acuerdo definitivo con el Gobierno, lo más pronto posible, para iniciar su vida política sin armas.

Confidencial Colombia: El proceso de paz está en su recta final ¿Qué es lo que falta para que haya un acuerdo terminado y definitivo?


Enrique Santiago Romero: Los asuntos pendientes de acordar corresponden al punto 3 de la agenda que es el Fin del conflicto, y el punto 6, que trata sobre la implementación, verificación y refrendación. También falta aproximadamente 40 salvedades o asuntos pendientes de cerrarse derivados de la discusión de los puntos 1, 2, 4 y 5 de la agenda; que són:

Esclarecimiento del paramilitarismo y garantías de seguridad para los antiguos guerrilleros y para la población civil, respecto al accionar de bandas criminales y organizaciones sucesoras del paramilitarismo. Quiero mencionar que el número de asesinatos de defensores de derechos humanos y dirigentes sociales ocurridos en los últimos días ponen de manifiesto que el paramilitarismo y las tramas negras son la mayor amenaza al proceso de paz.

También, falta por discutir las normas de amnistía e indulto; implementación de la Jurisdicción Especial para Paz (JEP) y el mecanismo de elección de los magistrados. Reincorporación a la vida civil de los antiguos guerrilleros. Definición de los Territorios de paz o zonas donde se producirá esa reincorporación. Mecanismos de Participación política. Proceso de Dejación de armas. Garantías de no repetición, asunto que debía haberse cerrado en el punto 5, victimas, y que se decidió trasladarlo al punto 3.

C.C: ¿Qué se firmará?


E.R.S: En poco tiempo, como bien ha dicho el Presidente Santos no necesariamente en el mes de marzo, aunque ojalá que sí, deberá firmarse lo relativo al cese al fuego bilateral y definitivo, que en la práctica es el fin del conflicto. Lo relativo a garantías de seguridad y políticas para acabar con el paramilitarismo; los mecanismos de elección de magistrados de la JEP y criterios sobre amnistía. Todos los anteriores temas llevan meses trabajándose y la discusión está muy avanzada o incluso hay criterios ya acordados en anteriores acuerdos, como es el caso del tema de la amnistía adoptados en el acuerdo de Justicia.

C.C: Aunque se han pactado parcialmente cuatro acuerdos hay muchos de ellos que tienen subpuntos a los que no se llegaron a un conceso porque dependían de otros puntos. Con esto da la impresión que los acuerdos están a medias ¿Qué ha pasado con eso?


E.R.S: Los temas pendientes de acordarse están inter relacionados y es difícil cerrar acuerdos sobre cada uno de ellos de forma aislada. Del acuerdo de cese al fuego bilateral depende en buena medida el acuerdo de dejación de armas.

Del acuerdo sobre amnistía depende el acuerdo de reincorporación a la vida civil y participación política. Del acuerdo sobre desaparición del paramilitarismo depende a su vez de la dejación de armas y el acuerdo de garantías de seguridad para los antiguos guerrilleros y la población civil.

Por ello, hay que hacer un esfuerzo en cerrar varios temas pendientes a la vez y no de forma independiente o aislada. Lo positivo de esta situación, es que cuando se cierren estos temas pendientes probablemente se cerraran todos a la vez.

C.C: En el tema de justicia hay muchas cosas sueltas, que si bien es cierto hace seis meses se pactó, en la opinión pública han generado dudas. ¿En qué han trabajado al respecto?


E.R.S: El acuerdo de justicia no se cerró hasta el 15 de diciembre, debido a que el Gobierno no acepto, después de firmarse ante la comunidad internacional, el acuerdo del 23 de septiembre de La Habana. Lo único que queda por definirse es el tratamiento diferenciado, equilibrado y equitativo para los agentes del Estado, y en esa materia la iniciativa corresponde exclusivamente al Gobierno.

C.C: ¿Cómo se va a elegir a los magistrados que van a conformar el tribunal donde se va a juzgar a las FARC?


E.R.S: Se elegirán por un comité de escogencia conformado por personas a su vez elegidas por instituciones de toda credibilidad ética e imparcialidad. En ningún caso se elegirán directa o indirectamente por la Mesa de Conversaciones.

C.C: El presidente Santos ha dicho que, en la elección de los magistrados, las FARC no va a tener ninguna injerencia ¿Qué opina la delegación del grupo guerrillero al respecto? ¿Cuántos magistrados conformarán la corte?


E.R.S: El número de magistrados que conformarán la Jurisdicción Especial para la Paz está establecido en el acuerdo del 15 de diciembre. 20 magistrados colombianos y 4 extranjeros conformaran el Tribunal. Las Salas de Justicia de la JEP estarán compuestas por un total de 18 magistrados colombianos y 6 magistrados extranjeros

C.C: ¿Quiénes, además de las FARC, serán juzgados o beneficiados en el marco de la Jurisdicción Especial para la Paz?


E.R.S: La Jurisdicción Especial para la Paz es competente para conocer sobre todas las conductas y actos no amnistisiables ocurridos en el marco del conflicto, tanto por combatientes -rebeldes y agentes del Estado- como por civiles no combatientes, ya fueran políticos; financiadores, organizadores o instigadores del paramilitarismo; funcionarios públicos no combatientes; funcionarios de gobiernos extranjeros o cualquier otra persona respecto a la cuales se formularan acusaciones serias y consistentes. No se trata de un sistema inquisitorial, sino de un sistema contra la impunidad del que nada debe temer quien no haya cometido infracciones contra el DIH o quien no haya vulnerado gravemente los derechos humanos.

C.C: ¿La Fuerza Pública (militares) serán juzgados de la misma manera como lo van hacer con las FARC?


E.R.S: Ni la Fuerza Pública, ni las FARC ni las instituciones del Estado van a ser sometidas a la JEP. A esta jurisdicción deberán someterse personas, pertenecientes a instituciones o a las anteriores organizaciones. Personas contra las que se presenten acusaciones sólidas y debidamente fundadas.

C.C: ¿Cómo será el proceso de dejación de armas? ¿Qué harán con ellas?


E.R.S: Sobre la dejación de armas se puede afirmar que será rápida, efectiva y verificada por las Naciones Unidas; e implicará que nadie -ninguna persona, ni organización ni institución- nunca más vuelva a utilizar las armas para hacer política en Colombia.

C.C: El presidente Santos ha reiterado varias veces, realizar el plebiscito y no la Asamblea Constituyente como lo han planteado las FARC. ¿Qué piensa el grupo guerrillero o qué pasaría si no hay un conceso entre las partes frente a este tema?


E.R.S: Hay amplio acuerdo sobre que los acuerdos de paz deben ser refrendados- así consta en el Acuerdo General- y que las partes definirán las reformas institucionales necesarias para la puesta en práctica de lo acordado. La constituyente no es una forma de aprobación de los acuerdos, sino que debería ser un mecanismo de implementación de las reformas institucionales previamente definidas en el Acuerdo Final.

C.C: ¿Para cuándo cree que vamos a tener una firma que de por terminado el conflicto armado?


E.R.S: Sin duda algúna pronto. Me consta que las FARC tienen interés en que así sea, quizás incluso más interés que el Gobierno, por lo siguiente: para poder iniciar su nuevo itinerario político a la mayor brevedad y concurrir en paz a las próximas convocatorias electorales.