El dólar estadounidense sigue al alza, lo cual ha generado nerviosismo por parte de los países latinoamericanos, que ven que el poder adquisitivo de su moneda decrece.
Ante el aumento que se augura que va a seguir teniendo el dólar, las economías de Latinoamérica están preocupadas. Si esta predicción se cumple, sus monedas se verán devaluadas, lo que significa que perderán su valor nominal y con ello la confianza por parte de sus inversores.
Colombia es uno de los países que se verían más afectados por el alza del dólar, donde se han superado todos los máximos históricos y el dólar ha llegado a valer más de 3.000 pesos. La devaluación del peso colombiano ha alcanzado un 36%, una cifra alarmante. Uruguay también también ha sufrido una de las caídas más abruptas de los últimos meses, según publica Notimérica.
Sin embargo, no todo son malas noticias para Latinoamérica. Los países que exportan bienes y servicios como Chile, México, Perú o Brasil verán como incrementan sus ganancias en el mercado internacional. Cuando venden sus productos reciben un pago en dólares, lo que significa más monedas locales.
Los importadores como Colombia, Venezuela, Guatemala o la República Dominicana son los que sufrirán con el cambio, sobre todo en relación con los alimentos.
Los países que utilizan el dólar no notarán grandes cambios de foma interna, aunque sí verán las exportaciones encarecidas y por eso se reducirá su competitividad en los mercados, pudiendo desembocar en pérdidas en empresas y desempleo.
El sector turístico, por su parte, se verá beneficiado. Esto son buenas noticias para aquellos que reciben a mas turistas estadounidenses: México, Argentina, Brasil y la República Dominicana.