En el evento se armó una pelotera por los anuncios de Gerlein, se aplazó la primera votación por desconocimiento en el uso del voto electrónico, le apagaron el micrófono a Leyva y la división de los militantes fue pronunciada. “Desorden”, ese fue el enunciado principal de los asistentes a la Convención Nacional del Partido Conservador, de la cual Marta Lucía Ramírez resultó vencedora.
Luego de meses de diatribas y agarrones, los conservadores proclamaron a la ex ministra de Defensa como la candidata presidencial para las elecciones. Las bases del conservatismo celebraron en una convención que muchos calificaron estuvo “patas arriba”.
Todo apuntaba a que la candidata Marta Lucía Ramírez sería la elegida por el conservatismo para representar al partido en las elecciones. Desde tempranas horas, decenas de simpatizantes de la ex ministra de Defensa le demostraron con pancartas y alaridos su apoyo, acción que incluso concluyó con un multitudinario abucheo en contra de Roberto Gerlein por el tema de una coalición.
Pese a que la votación estuvo repleta de baches y forcejeos entre los bandos anunciados del partido, Ramírez logró posicionarse como el gallo de pelea azul para el proceso electoral con 1047 votos. Asimismo, sus homólogos Pablo Victoria y Álvaro Leyva, obtuvieron 138 y 84 votos respectivamente.
“Gracias a todos. El Partido Conservador va a ganar en la primera vuelta, vamos por la Presidencia”, declaró la candidata.
A su turno, Victoria destacó que “Marta lucia merecía este triunfo, los conservadores hemos salido muy unidos y con vocación de poder. Vamos a jugárnosla con ella para alcanzar la Presidencia de la República”, aseveró.
Respecto a las dificultades en el tema del voto electrónico, método que fracasó en primera instancia debido a que la logística no le enseñó a los asistentes a usar el control para votar, Victoria explicó que “en parte ha sido culpa de la compañía encargada y del partido porque no ensayaron estos mecanismos, pero de todas maneras se solucionaron estos problemas y pudimos seguir adelante”.
De hecho, el aprieto por la votación electrónica anuló el primer ciclo de escrutinio para escoger entre candidato propio o una coalición, el cual, en otro escrutinio, registró un porcentaje de 1190 votos a favor y 116 en contra. Los azules escogieron por ir las elecciones con candidato propio y declinaron una coalición con Santos.
Gerlein abucheado
Al término de las intervenciones de los precandidatos, el veterano senador Roberto Gerlein, se disponía a iniciar su intervención sobre una coalición con algún movimiento político. Tan solo unos segundos después de subir al micrófono, el congresista fue abucheado por decenas convencionistas que pedían su inmediata expulsión del evento.
Los alaridos no dieron lugar y Gerlein se vio obligado a interrumpir su intervención y pidió la ayuda de los directorios. “Marta Lucía, controla a tu gente por favor. Si no nos dejan hablar, habría que suspender la votación.”, dijo.
“Por primera vez en mi vida en una reunión conservadora no me siento seguro”, señaló el congresista.
En respuesta, Ramírez intentó calmar al público y argumentó que “si el conservatismo no está unido, no logrará alcanzar la Presidencia”. Sin embargo, en el preciso momento en que Gerlein vocalizaba, los gritos volvían.
Adicionalmente, resaltaron voces que culpaban a Ramírez y a Victoria de traer agitadores para entorpecer el proceso y callar a Gerlein. Otros reiteraron que aquellos de tintes reeleccionistas eran la mayoría y que al momento en que se les habilitara un espacio para hablar, el rumbo de la convención tomaría otro giro a favor del Presidente. Sin embargo, el jefe del partido, Omar Yepes, anunció que los representantes encargados de exponer los términos de una coalición abandonaron el recinto.
Así las cosas, Yepes decidió suspender la votación por 20 minutos mientras los ánimos se relajaban. En todo caso, el escrutinio continuó. Las cabezas del movimiento aseguraron que se ofrecieron las garantías necesarias para el curso de la convención. Sin embargo, Gerlein se retiró.
“Lamentamos que Gerlein se haya tenido que retirar del evento, él no regresa”, añadió Yepes.
La retractada de Leyva
Álvaro Leva fue uno de los personajes más polémicos de la convención. En muchas ocasiones provocó denuncias por sus contantes intervenciones durante las votaciones e incluso, la logística decidió cerrarle el micrófono luego de que interrumpiera el escrutinio para declarar que se iba a perder la personería jurídica del partido.
Sin embargo, fue la decisión de abandonar su candidatura la que provocó estruendo. A pesar de que no precisó en detalle al respecto, el exprecandidato denunció el rumbo de la convención de alejarse del uribismo.
El papel del Centro Democrático
Luego de que los conservadores escogieran candidato propio por encima de una coalición con el Centro Democrático, crecieron las incógnitas respecto al rol del uribismo en el camino electoral de los azules.
En efecto, Ramírez declaró que frente a una posible alianza con el Centro Democrático, hay algunas expectativas, pero todas se ejecutarán si Óscar Iván Zuluaga, candidato del uribismo, así lo decide. “Él será un formidable contendor, pero miraremos una alianza después de la primera vuelta”, anotó.
No obstante, las bases del conservatismo anunciaron en varias ocasiones que una jugada en conjunto con el uribismo para hacerle frente al gobierno Santos es posible.
Desorden antes del rifirrafe
A primera luz del día, empezaron a llegar decenas de militantes al Centro de Convenciones Gonzalo Jiménez de Quesada en la capital, bajo el lema de decidir el rumbo del Partido Conservador hacia las elecciones. En efecto, y tal como se había fraguado, en la entrada del evento, numerosas voces de tinte reeleccionista y otras de apoyo al candidato propio tuvieron lugar.
En contexto, los convencionistas votaron en primera instancia si se iban a las elecciones adheridos a una coalición con el uribismo, o si concentraban la directriz del partido en apoyo al presidente Santos. El escrutinio para un candidato propio dependía de si los asistentes declinaban apoyar a Santos o una unión con el Centro Democrático.
En tal razón, el precandidato Pablo Victoria Wilches, se mostró optimista por la multitudinaria asistencia, y aseguró que la gente escogería por un candidato propio. “Mediante dios ganamos. El partido no se va ir de rodillas al Partido Liberal”, precisó.
Asimismo, Luis Segundo Villareal, ex candidato a la Cámara por el Valle del Cauca, afirmó que el departamento apoyaba en un cien por ciento a la candidatura de Victoria y precisó que “el conservatismo no puede seguir mamando como ternero grande de rodillas”.
Desde el plano reeleccionista de Santos, varios convencionistas asistieron usando camisetas estampadas con el logo del partido y el nombre del Presidente. Ellos afirmaron que los “conservadores con tanta división que tienen, con candidato propio no llegan a ninguna parte”.
Pese a que las personas ingresaron en calma a las instalaciones, al parecer, no se abrieron por completo las puertas y la entrada del evento se taponó. Momentos después, dicen los militantes, que un desorden en el ingreso generó por pocos minutos caos y alaridos. Esto está “patas arriba”, decían varios de los convencionistas.