La misión de la OEA que observó el plebiscito en el que ganó el “no”, presentó sus conclusiones finales ante el Consejo Permanente de ese organismo en Washington. Dentro del reporte, la misión resaltó la agilidad con la que Colombia llevó a cabo el plebiscito sobre el acuerdo de paz, aunque también anotó cosas que hicieron falta.
La misión de la OEA encargada de observar el desarrollo del plebiscito con el que se esperaba aprobar los Acuerdos de paz, firmados entre el Gobierno y la guerrilla de las Farc, llamó la atención sobre la agilidad con la que el país llevó a cabo el proceso electoral.
Además resaltó que: “El resultado del Plebiscito reflejó la importancia de un mayor diálogo político, que permita multiplicar los esfuerzos para alcanzar y consolidar una paz que trascienda en el tiempo”, pero dijo también que “sin perjuicio de la polarización política y la crispación que este proceso plebiscitario generó en el país, los miembros de la Misión desplegados en el territorio nacional observaron un clima de tranquilidad donde primó el respeto”.
Pero, unos de los puntos sobre los que también comentó fue sobre el desequilibrio en el acceso a los medios de comunicación, el financiamiento político-electoral en favor de la opción del ‘Sí’, la premura con la cual se convocó al plebiscito y la falta de pedagogía para explicar los acuerdos.
En el documento presentado se afirma que “el tiempo y la premura para llevar a cabo el Plebiscito impidieron incluir o desarrollar algunas etapas que usualmente forman parte del ciclo electoral, como la apertura del censo electoral para recibir nuevas inscripciones o aceptar cambios de domicilio”.
Por su parte, el Jefe de la Misión y ex Presidente de Guatemala, Álvaro Colom, dijo que “el sistema electoral colombiano respondió de forma satisfactoria ante un evento electoral de características singulares, a pesar de no contar con el tiempo ideal para su planificación”.
Destacó también la rapidez con la que se realizó el conteo de votos, resaltando que “la transmisión de resultados electorales preliminares fue un proceso ágil y expedito, lo que sitúa a Colombia como el país con el sistema más rápido de la región”.
