De acuerdo con estas acusaciones, los ataques perpetrados por los ejércitos nacionales, también afectaron a grandes poblados donde habitaban los civiles en medio del fuego cruzado del conflicto. Ante estas denuncias, la ONU argumenta que tiene en su poder “abundante material visual”, que demostraría los ataques con estas armas prohibidas aun con los terroristas.
Tras una intensa investigación por parte de la Organización de las Naciones Unidas ONU en Siria, la entidad ha denunciado que las fuerzas militares sirias y rusas usaron diferentes armas químicas, totalmente prohibidas por sus efectos letales e indiscriminados en la población.
De acuerdo con estas acusaciones, los ataques perpetrados por los ejércitos nacionales, también afectaron a grandes poblados donde habitaban los civiles en medio del fuego cruzado del conflicto. Ante estas denuncias, la ONU argumenta que tiene en su poder “abundante material visual”, que demostraría los ataques con estas armas prohibidas aun con los terroristas.
Al utilizar municiones lanzadas desde el aire, sabiendo que había trabajadores humanitarios operando en el lugar, las fuerzas sirias han cometido un crimen de guerra al atacar deliberadamente personal de ayuda, negar la asistencia humanitaria y atacar a los civiles”, señala el informe.
El estudio confirma el uso continuado de gas cloro por parte de las fuerzas sirias, lo que “demuestra una clamorosa indiferencia por sus obligaciones legales internacionales y también equivale a un crimen de guerra por ataques indiscriminados contra la población civil”.
