Tras la visita del presidente Santos y la Comisión Segunda del Senado al archipiélago en el pasado mes de septiembre, la comunidad raizal se mostró a la expectativa por ver avances sobre el plan del Gobierno para hacerle frente al fallo de La Haya. No obstante, ellos aseguran que hay un total estancamiento del proceso que solo obedece a un “desfile de personal” sin fines concretos. Mientras que los isleños proponen referendo para el 2015, el senador Édgar Espíndola, miembro de la Comisión, sugiere romper relaciones con Nicaragua.
A dos semanas de cumplirse un año del fallo impuesto por la Corte Internacional de Justicia (CIJ), en el que Colombia pierde mares territoriales frente a Nicaragua, son pocos los avances concretos en el tema. La comunidad raizal expresó nuevamente su preocupación ante el Gobierno, por mantener estancada una posible solución al litigio. El último adelanto al respecto, fue la alocución del presidente Santos durante un recorrido por San Andrés, donde afirmó que lucharía con toda la contundencia por proteger la soberanía del país y los mares colombianos.
A los anuncios del mandatario, se suman la decisión del Gobierno de declarar inaplicable al fallo de La Haya, debido a la ausencia de un decreto que estipule los límites marítimos entre los dos países en el Congreso de la República, y el patrullaje continuo de embarcaciones colombianas en el meridiano 82.
Bajo este panorama, Corinne Duffis Steel, lideresa raizal de la organización Movement for the Ethnic Native Self Determination (Amen), (por sus siglas en español: Movimiento por la Autodeterminación Étnica Nativa), explicó que es un “desfile diplomático” el que el Estado instaló en la isla para ratificar su soberanía, pero en números concretos “no han hecho nada”.
“Se habla de la danza de los millones (plan de mejoras de infraestructura e inversión de San Andrés) pero no se sientan a hablar y no están dispuestos a buscar una solución. ¿Cómo van a hacer para proteger al pueblo raizal que no tiene otro territorio más que la isla”?.
El referente de una jornada de paros similar al agrario o a la minga indígena en el territorio nacional, no es modelo que amerite una solución significativa para la lideresa raizal, quien reiteró a Confidencial Colombia que en el 2015 se hará un referendo con la población isleña, para determinar si independizarse del país es la opción que le devuelva a la comunidad, lo perdido tras el fallo de La Haya y evitar la “extinción” de los nativos. Vea: Independencia, la opción de los raizales de San Andrés.
“Si no hacemos nada ahora, vamos a desaparecer como pueblo”, añadió Steel
En contraste, tras la asistencia de miembros de la Comisión Segunda del Senado al recorrido presidencial de Santos por el archipiélago, en septiembre, se especulaba un adelanto en materia de participación política y visibilidad ante el Gobierno.
Según el senador Edgar Espíndola, la tensión con Nicaragua y los raizales de por medio, son puntos de acciones inmediatas.
El legislador explicó que en el momento en que el gobierno nicaragüense demandó nuevamente ante la CIJ en el mes pasado, exigiendo plataforma continental colombiana, el país sandinista rompió lo convenido en el acuerdo Esguerra-Bárcenas firmado en 1928.
“Esa es una causal meritoria para pedir la nulidad. La convención de Viena estipula que hay que notificar a la otra parte, darle 90 días o tres meses para que se pronuncien y si no lo hacen, ir ante Naciones Unidas para resolver el tema”, dijo el senador.
Adicionalmente, destacó su solicitud presentada al gobierno del presidente Santos para que “rompa relaciones con Nicaragua”.
“Colombia no puede permanecer pasiva a la hora de defender su soberanía. No podemos permitir que nos sigan recortando cada vez más nuestro territorio”, agregó.
Respecto a la iniciativa de la comunidad raizal por adelantar un proceso de independencia a través de un referendo, el Senador manifestó que “la gran mayoría de los sanandresanos se sienten colombianos. Siempre se levantarán algunas voces en contra pero no es el sentir mayoritario de los isleños”.
Por otro lado, el plan de independencia de la comunidad nativa afronta un enorme reto y es el financiamiento de infraestructura y desarrollo para isla. Espíndola precisó que los proyectos que hoy tiene San Andrés se derivan de los trámites que envían desde el centro del país.
“Los recursos propios del archipiélago no le dan para las obras de infraestructura que hoy se adelantan. Si bien, el gobierno no ha llegado al 100 por ciento de suplir todas las necesidades, si ha hecho presencia en San Andrés con programas que les permitan tener presencia del Estado”.
Paralelamente, la oficina de prensa de la senadora Alexandra Moreno Piraquive, miembro de la Comisión Segunda y quien ha estado en el Capitolio en tres periodos seguidos, indicó que “el tema continúa en espera”.
De igual manera, desde el ámbito de las relaciones bilaterales, la Cancillería aseguró a este medio que las herramientas jurídicas para hacerle frente a las “pretensiones expansionistas de Nicaragua” continúan en estudio.
Seguramente, antes del 19 de noviembre, fecha en que se cumple un año del acato del Fallo impuesto por la CIJ, el presidente Juan Manuel Santos, junto con sus ramas gubernamentales a cargo del caso, se expondrán al respecto. Por el momento el panorama vislumbra incertidumbre.