¡Santos retome el rumbo!

Al hacer un análisis de los tres años de gobierno de Juan Manuel Santos, el precandidato del Centro Democrático le hace un llamado para que en este último año de mandato retome las banderas que le fueron entregadas por parte del uribismo por el que fue elegido.

Tras aclararse que el mecanismo para escoger el candidato del Centro Democrático será la consulta popular, uno de los precandidatos, Carlos Holmes Trujillo, en entrevista con Confidencial Colombia se mostró plenamente confiado de que será él el gran vencedor de esa contienda interna, al destacar el repunte que ha tenido en las encuestas frente a sus compañeros de campaña.

Al revisar los tres años de gobierno de Juan Manuel Santos, dijo que varios son los errores que se han cometido, pero que aún está a tiempo de subsanarlos, sobre todo, le pide que regrese a las políticas por las cuales fue elegido, que según los uribistas, traicionó de frente.

Trujillo también se adelantó en el tiempo y viéndose ya como Presidente electo se atrevió a pronosticar cuáles serían los cargos que en su gobierno ocuparían Oscar Iván Zuluaga, Francisco Santos y Juan Carlos Vélez.

Confidencial Colombia: Analizando el Gobierno del Presidente Juan Manuel Santos en estos tres años ¿Cuál considera que ha sido el error más grave que ha cometido?

Carlos Holmes Trujillo: Son muchos. En primer lugar, haber desconocido el mandato que recibió de los colombianos, quienes se expresaron copiosamente a favor de la continuidad de las políticas del Gobierno de Álvaro Uribe. Desconocer eso no hay duda de que le ha generado mucha incertidumbre y le está haciendo mucho daño a Colombia.

También hubo un gran error en el manejo de la reforma a la educación superior, tanto que tuvo que retirarla debido a la movilización de los jóvenes en las calles de forma pacífica.

Cometió un grave error en la forma como se manejó el proyecto de reforma a la justicia, tanto, que ese episodio produjo la deslegitimación simultánea de todos los poderes como nunca se había presentado en la historia reciente del país.

Ha descuidado la seguridad, porque ese es el reclamo de todos los colombianos en las distintas regiones del país. Además de ello, la manera como está manejando las iniciativas en el tema de salud, han sido equivocadas, hasta el punto que es importante hacer una pausa, reflexionar con mayor detenimiento, porque no sería bueno para Colombia una reforma que no conserve los avances que se han hecho y no corrija las deficiencias que se tienen, si esta es aprobada por el Congreso.



C.C: ¿Santos va a la reelección o será Germán Vargas Lleras el candidato heredero?

C.H.T: Yo sí creo que el Presidente Santos se va a presentar como candidato a la reelección, y será para mi muy grato y estimulante poder competir con él en las elecciones. Tenemos que construir el escenario para que le resulte fácil a los colombianos generar un gran debate con respecto a lo que él ha venido haciendo y a lo que proponemos nosotros como Centro Democrático en beneficio del país.

C.C: ¿Cuál es la garantía para derrotar a Juan Manuel Santos en las urnas por parte del Centro Democrático?

C.H.T: Los colombianos acogieron una política durante muchos años, la rodearon de un apoyo como no se le ha presentado nunca a una política pública de manera prolongada, esa que sirvió para elegir al Presidente Uribe, para reelegirlo y elegir al Presidente Santos, y con ello se le dio un mandato de continuidad. Entonces es retomar ese rumbo y por supuesto hacer los énfasis nuevos que hay que hacer en distintas áreas sociales, en materia de inversión y en materia de generación de empleo.

C.C: ¿Qué consejo le da al Presidente Santos para este último año de gobierno?

C.H.T: Que retome el rumbo. Nunca es tarde y si él, así sea en la última etapa de si mandato, retoma el rumbo y recoge otra vez las políticas para cuya ejecución fue elegido, eso le vendría muy bien al país, porque permitiría, en una etapa de transición facilitar las cosas para el próximo gobierno que será, y ojo a lo que le estoy diciendo, que será de Centro Democrático.

El fenómeno que está naciendo, que está creciendo y que se va a consolidar, no tiene antecedentes en el país.

Las Farc y el Proceso de paz


C.C: ¿El Proceso de Paz se puede leer como un error del Presidente Santos?

C.H.T: No tengo ninguna duda. No estoy de acuerdo en la manera como se ha conducido el proceso en la Habana por varias razones.

Primero, la negociación en medio de la guerra ha demostrado ser un fracaso. Segundo, iniciar un proceso tan profundo y tan complejo en un año a vísperas de unas elecciones es un error. De otro lado, plantear un proceso sobre la base de un marco jurídico para la paz que lo que hace es promover la impunidad, es otro error. Y considero igualmente otro error, negociar políticas públicas con el terrorismo.

De manera que si llego a ser elegido Presidente de la República, suspenderé de manera condicional esas conversaciones en la Habana.

C.C: ¿Y retomaría el proceso?

C.H.T: Si las Farc cesan definitivamente sus acciones violentas como condición inamovible para conversar.

C.C: Precisamente por esas posiciones tan radicales a los uribistas los califican como ‘enemigos’ de la paz. ¿Cómo hacer para cambiar ese imaginario en los colombianos que sí creen en el proceso de paz?

C.H.T: Ese es un slogan del Presidente Santos totalmente erróneo. Todos queremos la paz, pero queremos la paz como resultado de la acción legítima de las fuerzas del Estado, conversando previa cesación de las acciones criminales por parte de las Farc, sin impunidad y sin negociar políticas públicas con el terrorismo. Además yo no me dejo encasillar en un falso dilema que ha tenido el país, y es que aquí se ha pretendido demostrar que quienes abogan por el ejercicio de la autoridad, como guerreristas, y a quienes propenden por la negociación, como pacifistas. Gravísimo error.

El ejercicio de la autoridad legítima no es una opción política, es una obligación de carácter constitucional y legal. Y la opción política que son los diálogos, es bienvenida en la medida en que se den las condiciones y lo esencial para que una conversación tenga posibilidades de éxito, es que ésta se haga, no en medio del terrorismo, sino previa cesación de las acciones criminales por parte de los terroristas.

C.C: Usted que estuvo en el servicio diplomático por mucho tiempo, ¿no cree que esa posición sea ir en contravía del deseo que tienen los colombianos y la comunidad internacional en que ya es hora de que Colombia logre la paz?

C.H.T: Yo no estoy diciendo que no esté de acuerdo con las conversaciones de paz, lo que no comparto es la manera como se están llevando a cabo. Quiero la paz y estoy seguro de que hay un elemento político fundamental para solucionar este tipo de situaciones.

En relación con la comunidad internacional, déjeme decirle que siempre ha estado dispuesta, después de una época, después de una etapa, en la vida colombiana a apoyar nuestros esfuerzos. Yo personalmente tuve que trabajar cuando fui Alto Comisionado para la Paz, para buscar el interés y el apoyo internacional a los esfuerzos que se hicieron en su momento. Pero lo que hay que tener en cuenta, es que el apoyo de la comunidad internacional no es a Santos como tal, ni a este proceso como tal, sino a todos los esfuerzos que Colombia haga en procura de la paz.

Ahora eso lo recibe por supuesto el gobierno del Presidente Santos, pero en otras condiciones también sucedería.

C.C: ¿Cree que se firmará la paz pronto?

C.H.T: Yo no he creído en esto en ningún momento. Yo quiero la paz y si algo me ha llevado a reaccionar como lo estoy haciendo, es que lo que está pasando nos aleja cada día más de la paz. En lugar de acercarnos, nos aleja. Ya lo entenderá después el país.

Panorama político del Centro Democrático



C.C: ¿Cómo hacer para que el Centro Democrático no explote por dentro con tantos personajes buscando un mismo objetivo?

C.H.T: Voy a hacer una reflexión general. ¿Qué es lo que está pasando con la institucionalidad política?

En una etapa nosotros pasamos del bipartidismo a la dispersión. Es decir, frente a la crítica que se hacía en el sentido de que nuestro sistema, era un sistema cerrado por la prevalencia del bipartidismo, lo abrimos con motivo de las deliberaciones de la Constituyente del 91. Pero eso condujo a una explosión de medianos y pequeños partidos que no lograron consolidarse como organizaciones políticas.

Frente a ese hecho el país resolvió hacer un esfuerzo al tratar de reconstruir el rumbo. Entonces pasamos de la dispersión a la reconstrucción. De hecho hay menos partidos hoy, pero lo que ha sucedido es que los viejos partidos cada vez se debilitan más, y los nuevos no se consolidan y la gran pregunta que hay que hacerse ahora es si los colombianos lo que quieren es una democracia sin partidos.

Porque a raíz de ese cambio en la institucionalidad política, la mayoría de los colombianos hoy es independiente. El 65% de los colombianos dice que es independiente porque no pertenece a ninguna colectividad, ni quiere ser calificado mediante ningún rótulo, entonces yo creo que la reflexión sobre la democracia colombiana debe ser de mucho más fondo. El problema no son las leyes, el problema no es el umbral, sino la capacidad o incapacidad de las distintas organizaciones para cautivar a la gente y hacerle sentir que en efecto son voceros de sus inquietudes, anhelos y esperanzas.

El Centro Democrático lo que apela es a eso, a ese gran sentimiento de los colombianos que hoy miran las cosas de manera independiente, por eso es un proyecto amplio, participativo e incluyente que convoca gente de todos los sectores y corrientes políticas. Que se le presenta un proyecto político para que lo mire y analice, y si cree que en ese programa están reflejadas sus esperanzas, se vincule al Centro Democrático.

C.C: ¿Cómo va a hacer el Centro Democrático cuando Uribe no esté?

C.H.T: nosotros estamos avanzando a la construcción de un movimiento significativo de ciudadanos. No es fácil, porque nos toca hacer campaña y construir organización. Porque el partido que nació para ese efecto, fue cooptado mediante las canonjías del poder parlamentario por el Presidente Santos. Poco a poco en esa construcción lograremos sentar las bases para que esta organización tenga vocación de permanencia y visión de futuro que es lo que estamos buscando.

C.C: ¿Francisco Santos les lleva mucha ventaja en esta precampaña?

C.H.T: Francisco Santos Calderón arranca con ventaja y lo hace porque durante ocho años fue Vicepresidente de la República y luego fue director dos años de un medio de comunicación radial. Esa es una diferencia muy importante. Oscar Iván Zuluaga, también ha estado en el escenario político durante los últimos años en posiciones destacadas como fundador del Partido de la U y como Ministro de Hacienda.

Yo estuve durante más de 15 años representando al país en el exterior. De manera que yo voy de atrás para adelante y si usted mira los resultados de las encuestas teniendo en cuenta lo mencionado anteriormente, el hecho de que esas encuestas en mi caso vayan mejorando sustancialmente, es un hecho bastante significativo.

En mi caso no he sentido ninguna incomodidad, ningún malestar ni presión especial, porque estoy saliendo al país haciendo el ejercicio y defendiendo al Centro Democrático y esto va muy bien.

C.C: En el escenario hipotético de que usted sea elegido Presidente ¿En qué cargos pondría a Zuluaga, Vélez y a Pacho Santos?

C.H.T: Si llego a ser Presidente de la República nombraría a Juan Carlos Vélez, Ministro del Interior; al doctor Oscar Iván Zuluaga, le diría que me acompañara nuevamente como Ministro de Hacienda y al doctor Francisco Santos le ofrecería la Cancillería.