A la par de las declaraciones de las Farc quienes solicitaron realizar un catastro extraordinario en Colombia como parte de sus propuestas sobre el tema agrario en los diálogos de paz, el presidente Juan Manuel Santos dijo que si el proceso no avanza, “nos paramos de la mesa”.
El presidente colombiano, Juan Manuel Santos, dijo hoy que si el proceso de paz con las Farc no avanza “nos paramos de la mesa” al tiempo que señaló que no habrá tregua como lo pide esa guerrilla.
“En la medida en que avancemos, estaremos satisfechos, sino avanzamos, nos paramos de la mesa. Yo espero que sigamos avanzando y mientras tanto las reglas de juego son también muy claras. Aquí no hay tregua de ninguna naturaleza”, señaló Santos a periodistas tras encabezar una reunión con líderes y pobladores del municipio de Santa Bárbara, en el departamento de Antioquia.
A su vez, el grupo guerrillero anunció hoy en un comunicado divulgado en La Habana su iniciativa de “realizar extraordinariamente un catastro alternativo del despojo y el desplazamiento forzado” como parte de sus propuestas referidas al tema de acceso y uso de la tierra.
Según el texto, leído por el guerrillero Ricardo Téllez, alias “Rodrigo Granda”, “la modernización y actualización de los sistemas de catastro y registro inmobiliario deben ser instrumento para la democratización de la propiedad sobre la tierra, su necesaria desconcentración, y de reparación integral de las víctimas del conflicto”.
La propuesta de diez puntos contempla catastros para la reforma rural, para los territorios campesinos, los interétnicos e interculturales, los indígenas y de afrodescendientes, y para los latifundios y grandes propiedades sobre la tierra.
Asimismo prevé un “catastro alternativo del desplazamiento y el despojo”, compatibilizar el sistema de información catastral con el de registros y organizar una veeduría internacional con participación de las comunidades rurales en el proceso, entre otras medidas.
Las Farc también consideran que el Gobierno de Juan Manuel Santos desarrolla una “mendaz campaña mediática” para “escamotear la necesaria reforma agraria, ocultando y protegiendo a los victimarios latifundistas, con la patraña de acusar a la insurgencia de ser la despojadora de la tierra de los campesinos”.
En ese sentido, la guerrila insistió en crear una comisión “de alto nivel” con su participación, la del Gobierno y la de gremios y organizaciones sociales para verificar la situación real de los supuestos terrenos despojados, y que se convoque además a las posibles víctimas para atender sus casos.
En los últimos días las Farc criticaron al Gobierno por organizar un acto de entrega de tierras a campesinos que supuestamente habían sido usurpadas por la guerrilla, y ayer cuestionaron incluso la voluntad del presidente Santos respecto a los actuales diálogos de paz.
Los negociadores de ambas partes discuten actualmente en la mesa de conversaciones en Cuba diferentes propuestas sobre el problema agrario, primer punto de la agenda de los diálogos iniciados en noviembre pasado.