El trabajador social pudo irse de Alepo antes de la guerra pero se negó a irse de la ciudad y decidió quedarse para continuar con su trabajo como voluntario y ayudar a los civiles, especialmente a los niños, con el fin de darle regalos en las calles y brindarles algo de esperanza.
Esta mañana, en el más reciente bombardeo en la ciudad de Alepo, en Siria, Anas al Basha, ´el payaso de la felicidad´, fue hallado muerto durante la jornada de ataque, el denominado símbolo de la niñez, era un trabajador social que se presentaba en todos los lugares de resguardos infantiles para intentar llevarle alegría a todos los niños atrapados en medio de la guerra.
Recordemos que la ofensiva militar sobre Alepo durante estas últimas semanas ha causado la muerte de centenares de civiles y ha empujado a unas 25.000 personas a huir de la ciudad, donde se estima que están atrapados unos 250.000 residentes, entre los cuales hay unos 100.000 niños.
Según la ONU, la ciudad tiene el riesgo de convertirse en un “cementerio gigante” ya que todos los hospitales han quedado devastados por los ataques.
El cuerpo sin vida del payaso Basha de 24 años, fue hallado el barrio de Mashhad, según lo informó la agencia AP.
“Él vivía para hacer reír a los niños y dar felicidad en el lugar más oscuro y más peligroso“, escribió en su cuenta de Facebook Mahmoud al Masha, quien se identificó como hermano de la víctima.
Según la prensa irakí, Anas pudo abandonar la ciudad antes del aislamiento por parte del enfrentamiento entre extremistas y fuerzas Nacionales, pero “ se negó a irse de Alepo y decidió quedarse allá para continuar con su trabajo como voluntario para ayudar a los civiles, dar regalos a los niños en las calles y brindarles esperanzas”, escribió Mahmoud al Masha en Facebook. Padre del Joven.
Alepo pierde con Basha una víctima más del conflicto y con él las risas de los más pequeños en Alepo.