Al expresidente ucraniano, Viktor Yanukovich, le extraña que su homologo en Rusia, Vladimir Putin, se abstenga de pronunciarse sobre las amenazas querecibió luego de su destitución.
En declaraciones a medios internacionales, el presidente destituido, Viktor Yanukovich, afirmó estar sorprendido por el silencio del gobierno de Rusia respecto a la situación humanitaria que acontece en Ucrania.
En efecto, mientras que desde la jefatura ucraniana exigen la captura del mandatario refugiado en Moscú, Yanukovich insiste en que “no fue derrocado” y que luchará por el futro de su país, sumido entre violentas jornadas de protestas.
“Rusia debe y está obligada a actuar, y conociendo el carácter de Vladimir Putin, me pregunto por qué está tan reservado y por qué guarda silencio”, declaró el dirigente.
Luego de que los episodios de violencia en Kiev registraran un centenar de muertos y miles de heridos -hechos que provocaron la destitución del mandatario- resalta la inquietud de por qué Rusia no se ha manifestado, puesto que fue este país con el que precisamente Ucrania prefirió estabilizar relaciones por encima de estrechar lazos con la Unión Europea.
Pese a que una parte del país culpa al mandatario de tener en sus lumberas a más de 100 fallecidos por la ausencia de diálogos en su administración, Yanukovich insiste en que las víctimas en Ucrania fueron “el resultado de la política irresponsable de Occidente que fue demasiado indulgente con el Maidán (manifestación en Plaza de Kiev)”
Respecto a su viaje a Rusia, reconoció que le “faltaron las fuerzas para mantener la estabilidad y evitar el caos” en y que las amenazas de “nacionalistas y neofascistas” causaron su partida a territorio moscovita. “No huí, pero me vi obligado a irme por una serie de amenazas”, precisó.
El jefe de estado prometió volver al país una vez se garanticen las condiciones de suridad para él y su familia. Por el momento, Alexandr Turchnikov, quien era jefe del Parlamento, ejerce como Presidente Interino. Basado en información de AFP y EFE.