Una manifestación de miembros de la Asociación Campesina del Catatumbo en Norte de Santander terminó en enfrentamientos con la fuerza pública. Según las comunidades, encapuchados se infiltraron en la propuesta para generar desórdenes y atacar a los policías, mientras que los manifestantes solo querían discutir con las autoridades la creación de una Zona de Reserva Campesina en esa zona del país.
Desde el sábado en la noche, cientos de campesinos del municipio de Tibú, una conflictiva zona de Norte de Santander, protestan por el “abandono al que los tiene sometido el Estado colombiano”, según afirmaron fuentes en el lugar.
El estancamiento en la constitución de una Zona de Reserva Campesina en el Catatumbo, así como la falta de vías, acueductos y condiciones sociales, obligaron a la comunidad a salir a las calles para exigir la presencia de las autoridades.
“Exigimos la presencia del ministro de Agricultura y de la gerente del Incoder para que nos expliquen por qué no han establecido la Zona de Reserva Campesina en el Catatumbo”, señaló a Confidencial Colombia el vocero de la Anzor, César Jerez.
Pero este miércoles, la protesta se tornó violenta y terminó en enfrentamientos con el escuadrón móvil antidisturbios de la policía. Según la agencia de noticias Prensa Rural, “desconocidos han lanzado piedras contra la fuerza pública mostrando su rechazo. Por otra parte se ha declarado un incendio en la casa del señor alcalde de Tibú, según informan fuentes presenciales y medios de comunicación”.
La asociación que lidera la protesta a emitido un comunicado en el que rechaza las acciones violentas y señala que la manifestación “es de estricto carácter pacífico. En cualquier caso ninguno de nuestros miembros ha participado en ese incidente y podemos decir, seguramente sin equivocarnos, que ese evento habría sido provocado por maleantes que trabajan junto a la policía, para desestabilizar y generar violencia, con el objetivo final de disolver, con la máxima fuerza posible, una manifestación legítima y legal”.
Los enfrentamientos bloquean la vía que conduce de este municipio a Cúcuta, la capital del departamento. Esto impide el paso, por ejemplo, de vehículos que transportan el crudo para diferentes compañías petroleras. Las autoridades de este lugar no se han pronunciado al respecto.