En Cali se están realizando los Juegos Mundiales (World Games), certamen que ha contado con la asistencia de competidores de varios países y puso las miradas de decenas de periodistas y ciudadanos en la capital de la salsa que se lució, entre otras cosas, durante la inauguración de la competencia.
Un equipo de logística se desplegó para que los extranjeros se sintieran bien en el país, de hecho, hasta personas bilingües hacían parte del comité de protocolo tal como debe ser en un evento mundial.
Cuando todo parecía andar de maravilla y al momento de la premiación, tristemente tanto esfuerzo se vio opacado por una falla no menor, visible en las medallas que fueron entregadas a los competidores con la palabra ‘word’ y no ‘world’. ¿Juegos mundiales… de palabras?
El Comité se disculpó y aseguró que el error es “ajeno a la voluntad de la organización (…) la equivocación involuntaria en ningún momento empaña el valor de la medalla ni el mérito del triunfo y se están tomando los correctivos necesarios”.
El hecho lamentable no puede pasar desapercibido así los europeos que reciban el galardón lo miren y no puedan disimular la risa. Colombia no es un juego de palabras, ni los recursos invertidos en las medallas equivocadas pueden pasar por alto .
Tomates para los “Word games”, que lejos de ser una competencia deportiva, parece que se hubiera premiado un concurso de ‘spelling’, o bien, que se tratara de un chiste que seguramente salió costoso y le dejó ver al mundo que en Colombia se baila salsa, pero hablar inglés… poco.