Según The Washington Post, padre e hijo pasaban muchas horas jugando al golf en su pequeña ciudad de Bankston, donde vivían. Los vecinos consternados con la noticia, comentaron que los Basher eran muy cercanos y cordiales con la comunidad. “Todo el mundo los quería, siempre iban sonrientes”, los recordó la hermana del padre, Pamela Brasher Dennis.
Un choque frontal de una camioneta Ford con una pick up Chevrolet a las 4:10 de la mañana se registró en un camino oscuro angosto ubicado en el condado de Fayetten en Alabama, Estados Unidos.
Tras el siniestro reportado por diferentes personas que pasaron por el lugar, las autoridades en medio de las labores de rescate se dieron cuenta de una impactante relación entre las dos personas del accidente, eran padre e hijo.
El padre identificado como Jeffrey Basher, de 50 años, estaba transitando la ruta para dirigirse a su trabajo donde se desempeñaba como repartidor de pan, y al otro lado de la via, estaba su hijo, Austin Brasher de 22 años, quien regresaba a su casa tras estar en una fiesta. Según el reporte de medicina legal, el padre murió en el acto y el hijo falleció en medio de la atención médica de urgencia en el hospital de la localidad.
La policía de Alabama reportó que ninguno de los dos conductores llevaba el cinturón de seguridad, y que el alcohol que ingerido por Brasher fue determinante en los reflejos y dominio en su forma de conducir.
Según The Washington Post, padre e hijo pasaban muchas horas jugando al golf en su pequeña ciudad de Bankston, donde vivían. Los vecinos consternados con la noticia, comentaron que los Basher eran muy cercanos y cordiales con la comunidad.
“Todo el mundo los quería, siempre iban sonrientes”, los recordó la hermana del padre, Pamela Brasher Dennis, directora de una escuela local. “Lo llamaban el hombre del pan”.
Austin Brasher se había graduado en el Lincoln College de Tecnología hacía tres años, y trabajaba como maquinista en G&S Machine. “Era el tipito dentro del gran camión”, lo recordó su prima, Maria Aker, quien dijo que a pesar de que su personalidad tímida él había sido “el centro de la fiesta”.