Hoy hace tres años, James Rodríguez protagonizaba uno de los momentos más memorables de la historia del fútbol colombiano. Con su zurda mágica se inventó una parábola ilógica que rebotó en el horizontal antes de batir las mallas de Uruguay. El mejor gol del Mundial, como fue catalogado, y uno de los mejores de toda la historia de los mundiales.
Con este gol en los octavos de final del torneo jugado en Brasil, se ganó un sitio entre la élite del fútbol mundial y se ganó además su fichaje por el club en el que milita ahora, el Real Madrid. James abrió el marcador con esta obra arte que ha pasado a ser portada del libro de oro del fútbol colombiano.