El expresidente ucraniano Leonid Kravchuk, advirtió que de no ventilarse la crisis de orden público, el país estaría al “borde de una guerra civil”. El anuncio se hizo efectivo tras la renuncia del primer ministro, Mykola Azáro.
En una reunión extraordinaria instalada en la Rada Suprema y el Parlamento Unicameral, el expresidente Leonid Kravchuk pretendió hacerle un jaló de orejas al orden legislativo del país, para advertirles que Ucrania está al “borde de una guerra civil”. El exmandatario pidió trabajar en una hoja de ruta que logre mitigar el conflicto.
En contexto, las últimas semanas han sido críticas para el país, luego de que el gobierno declinara una alianza con la Unión Europea para mejorar los acuerdos bilaterales con Rusia, acción que terminó en jornadas de protestas en la Plaza Europa de Kiev por parte de la oposición que insiste en coordinar esquemas con la UE.
Fuertes enfrentamientos se registraron entre los manifestantes y el escuadrón anti disturbios y pese a que los episodios de violencia se han atenuado, el conflicto deja cientos de heridos y cinco muertos.
En seguida, el mitin tomó un giro sustancial luego de que el primer ministro del país, Mykola Azárov, presentara su renuncia este martes al mismo tiempo que en el Parlamento los diputados continuaban dialogando si derogar o no las polémicas leyes que limitan los derechos de manifestación en la reunión extraordinaria de la Rada Suprema.
La renuncia de Azárov se hizo efectiva en una carta enviada al presidente Víktor Yanukóvich, quien acepto la dimisión. En el texto, el funcionario esgrimió que para “crear posibilidades adicionales de alcanzar un acuerdo político y social y en aras de un arreglo pacífico” presenta su renuncia.
El hecho provocó que las leyes sancionarías de actos de manifestación, las cuales fueron criticadas por Estados Unidos y la UE, fueran derogadas con una votación de 361 de los 412 registrados en la sala.
Así las cosas, el expresidente Kravchuk solicitó con urgencia una “hoja de ruta” para evitar una guerra civil. “Si la mayoría parlamentaria doblega a la oposición nada bueno saldrá de ello. Igual ocurrirá si los opositores insisten en presentar ultimátums”, aseveró el exmandatario.
EL plan pretende ventilar las diferencias desatadas por la negativa frente a la Unión Europea y silenciar la influencia de terceros en el proceso. “Aquí no tienen voz ni Estados Unidos ni Rusia, aquí habla Ucrania”, señaló.
Kravchuk propuso que la “hoja de ruta” sea vigilada por él y expresidente Leonid Kuchma, para garantizar la legitimidad y efectividad de los acuerdos que eventualmente se puedan llegar a concretar