Último intento para cerrar Guantánamo

Maniatado por un Congreso negado al cierre definitivo de esta cárcel en Cuba, y por el escepticismo de su propio partido, el presidente Obama hace otro intento por cumplir una de sus promesas insignias de campaña. Este martes anunció que presentará, un nuevo plan para clausurar el Centro de detención de Guantánamo, el cual alberga 91 presos actualmente.

El presidente Barack Obama afirmó hoy que clausurar la cárcel de Guantánamo (Cuba) equivale a “cerrar un capítulo” de la historia del país. Sostuvo que mantener esta cárcel abierta es “contraproducente” para la lucha antiterrorista y, además, daña las relaciones del país con naciones aliadas. El plan de Obama contempla transferir a una “localización segura”, a entre 30 y 60 presos a territorio estadounidense, algo a lo que se oponen los republicanos, quienes controlan actualmente el Congreso.

De 13 localizaciones propuestas, están prisiones ya existentes en Colorado o Carolina del Sur, así como la construcción de nuevas instalaciones en algunas bases militares del país. El presupuesto estimado por el Gobierno para acomodar a los detenidos de Guantánamo en suelo estadounidense va de 290 a 475 millones de dólares, en función de cuántos presos sean reubicados finalmente y de la instalación elegida.

De los 91 presos que alberga actualmente este Centro de detención en Cuba, 35 ya han recibido la aprobación para ser enviados a terceros países “en los próximos meses”, sostuvo. De los 56 restantes, 10 afrontan cargos o han sido condenados en procesos ante comisiones militares y los demás son considerados demasiado peligrosos para salir en libertad o ser transferidos.

El plan del presidente ahorrará US$ 335 millones en 10 años y US$ 1.700 millones a lo largo de 20 años, explicó el portavoz del Pentágono, Peter Cook. El Pentágono detalló que mantener la prisión de Guantánamo abierta es entre US$ 65 y US$ 85 millones más caro al año, que internar a los presos en una cárcel en territorio estadounidense.

Desde el principio de su mandato, la promesa de cerrar la cárcel ha tenido la oposición del Congreso estadounidense, especialmente de los republicanos, quienes rechazan la transferencia de los presos a cárceles dentro de Estados Unidos, por considerarlo ilegal.

El Centro de detención de Guantánamo llegó a albergar a unos 800 detenidos poco después de su apertura, ordenada por el entonces presidente George W. Bush, tras los atentados terroristas del 11 de septiembre de 2001. Actualmente, quedan 91.