Este viernes se conmemoraron 30 años de la toma y retoma del Palacio de Justicia. En un acto solemne el presidente Juan Manuel Santos pidió perdón a las víctimas por uno de los hechos más dolorosos para el país, tal y como lo ordena la sentencia de la Corte Interamericana de Derechos Humanos.
El presidente de Colombia, Juan Manuel Santos se dirigió a los presentes al acto conmemorativo manifestando que: “Hoy reconozco la responsabilidad del Estado colombiano y pido perdón” (…) quiero manifestarle a los familiares de víctimas que lamentamos profundamente lo ocurrido con sus seres queridos”, dijo el mandatario ante una nutrida audiencia conformada por familiares de las víctimas, de los desaparecidos, defensores de derechos humanos y representantes de todos los estamentos del orden nacional y distrital. El escenario escogido fue el vestíbulo del Palacio de Justicia.
En el acto se pronunciaron varios representantes de diferentes estamentos, entre ellos Orlando Quijano, por las víctimas de tortura; el magistrado Leonidas Bustos, presidente de la Corte Suprema de Justicia, el senador Antonio Navarro Wolff, entre otros.
“Lo hago de corazón, no solo para cumplir una orden”, dijo el Jefe de Estado al considerar que “todavía persiste una deuda moral con las víctimas y familiares del Palacio de Justicia, que deberá ser saldada con avances significativos en las investigaciones penales, la condena de los responsables, el establecimiento del paradero de los desaparecidos, la adecuada reparación a las víctimas y sus familiares y, sobre todo, el esclarecimiento de la verdad”, manifestó el mandatario.
El evento se vio interrumpido momentáneamente por algunos manifestantes que, desde la Plaza de Bolívar, pedían que el acto fuera abierto y contara con la participación de la ciudadanía en general.
Ante este reconocimiento las víctimas del Holocausto se pronunciaron. Confidencial Colombia habló con Juan Francisco Lanao, hijo de Gloria Isabel Anzola de Lanao una de las desaparecidas.
“Me alegra que se haya cumplido una de las ordenes de la sentencia de la Corte Interamericana de Derechos Humanos, sin embargo creo que el hecho de la toma va más allá que el acto de reconocimiento, porque el Estado le falló a Colombia, en todo se obró mal, aquí ha habido un pacto de silencio, hay muchas irregularidades que muestran que hubo un modus operandi de desaparición forzada y ejecuciones extrajudiciales, acciones que no se saben si se dieron mientras o después de la toma. Entonces nosotros como familiares queremos es dar con la verdad , saber qué pasó con nuestros seres queridos”, manifestó Lanao.
Juan Francisco tenía 18 meses de nacido, cuando a su madre, quien tenía un consultorio jurídico cerca al Palacio de Justicia y parqueaba su carro en el sótano de ese edificio, la desaparecieron, sin saber hasta la fecha que pasó con ella.
“Lo que he podido averiguar, es que mi mamá era la sobrina de una consejera de estado; que era una muy buena profesional , que era una abogada que ejercía el derecho cívico y comercial. Ella tenía su oficina en un edificio cerca de la Plaza de Bolívar, tenia su carro, el cual guardaba en el sótano del Palacio de Justicia y ese era su único vínculo con el escenario de los hechos que se conmemoran hoy. Yo sé que quería mucho a sus padres, es decir a mis abuelos, y sé que hubiera sido una persona muy grande. Lo único que quedó de ella fue el carro, la silla donde me llevaba a pasear cuando era un bebé y la gran duda de dónde está”.
Por su parte, Carlos Medellín, hijo del magistrado Carlos Medellín Forero asesinado durante la toma, a través de su cuenta de Twitter, también se refirió sobre las palabras del Presidente.
“Para que las heridas sanen deben estar limpias. Para eso se necesita la verdad. Luego viene el perdón. En ese orden. Lo otro es impunidad.(…) Perdón del Estado por los desaparecidos del Palacio. Cumplimiento de una orden judicial internacional”.
