Con “Tríptico de la infamia” el escritor colombiano y docente de la Universidad de Antioquia Pablo Montoya ha sido galardonado este jueves con el XIX Premio Internacional de Novela Rómulo Gallegos 2015
El escritor colombiano obtuvo este importante premio por su novela “Tríptico de la infamia” publicada bajo el sello editorial Literatura Random House. El jurado, conformado por la venezolana Mariana Libertad Suárez, el ecuatoriano Javier Vásconez y el puertorriqueño Eduardo Lalo, eligieron la novela como el mejor libro de habla castellana de 2015.
Montoya se llevó el premio entre 162 obras postuladas, provenientes de diecisiete países, de las que se preseleccionaron 7 finalistas entre los que también estaban los colombianos Héctor Abad Faciolince (La Oculta); Piedad Bonnett (Lo que no tiene nombre) y Óscar Collazos (Tierra quemada), lo que demuestra el buen momento que atraviesa la literatura colombiana.
El Premio Internacional de Novela Rómulo Gallegos fue creado con la finalidad de perpetuar y honrar la obra del eminente novelista y político venezolano estimulando la actividad creadora de los escritores de habla castellana. Fue instituido en agosto de 1964 y se entrega cada dos años, el día 2 de agosto, coincidiendo con el natalicio de Rómulo Gallegos. Esta distinción incluye una medalla de oro, un diploma y un premio en efectivo de 100.000 dólares.
Entre los autores que han sido galardonados con este importante premio se encuentran Mario Vargas Llosa (1967); Gabriel García Márquez (1972); Carlos Fuentes (1977); Fernando del Paso (1982); Abel Posse (1987); Manuel Mejía Vallejo (1989); Arturo Úslar Pietri (1991); Mempo Giardinelli (1993); Javier Marías (1995); Ángeles Mastretta (1997); Roberto Bolaño (1999); Enrique Vila-Matas (2001); Fernando Vallejo (2003); Isaac Rosa (2005); Elena Poniatowska (2007); William Ospina (2009); Ricardo Piglia (2011); Eduardo Lalo (2013).
La obra ganadora
Tríptico de la infamia relata las complejas relaciones entre el Viejo y el Nuevo Continente en los primeros años de vida de América, con el convulsionado siglo XVI como telón de fondo. Tres pintores europeos narran la historia. Jacques Le Moyne, cartógrafo y pintor de Diepa; François Dubois, pintor de Amiens, y Théodore de Bry, grabador de Lieja, se enfrentan por distintos caminos a la fascinación del mundo recién descubierto pero también al exterminio y el despojo que, en nombre de la religión, se llevan a cabo a ambos lados del Atlántico.
Son, cada uno a su manera, testigos, beneficiarios y víctimas de las grandezas e iniquidades de su tiempo, y de ello dan cuenta con las herramientas de su oficio. Con una prosa de gran factura y una sorprendente capacidad para dar materialidad al relato, Pablo Montoya logra sumergir al lector en una época de grandes cambios, polémicas y descubrimientos.