“Uribe resultó cobardón”

El presidente-candidato dijo que el expresidente Álvaro Uribe Vélez no lo ha dejado atacar ni un solo día “porque no fue su títere” y aseguró sentirse aterrado por la conducta del senador electo en el ruedo electoral.

“Mano de hierro pero guante de seda, me decía mi tío-abuelo”, menciona el presidente Juan Manuel Santos en referencia al calificativo de ser un hombre “conciliador”, que “no le dice a nadie: le voy a dar en la cara…” y que está orgulloso de ser de ese talante.

Sin embargo, durante la entrevista con la mesa de trabajo de Blu Radio, de la que hace parte la directora de Confidencial Colombia, María Alejandra Villamizar, el presidente Juan Manuel Santos –además de explicar las aristas de su plan de gobierno- le dio ‘palo duro’ al expresidente Álvaro Uribe de una manera particular, pues se refirió con dureza inusual de su antecesor en la Casa de Nariño.

En efecto, el mandatario dijo que “Uribe resultó cobardón” y que a pesar de haberlo defendido cuando era Ministro de Defensa, ahora ve con terror el accionar del exdirigente frente a casos como las presuntas chuzadas al proceso de paz desde la candidatura de Óscar Iván Zuluaga o la acusación que le hizo el congresista en la que señala una entrada de dineros vinculados con el narcotráfico a la campaña de Santos en el 2010.

“Defendí a Uribe convencido de que estaba defendiendo a una persona correcta, ahora descubrí que me tiene aterrado. ¿Dónde están las pruebas de semejante acusación que hizo? (En tres ocasiones el expresidente decidió no ahondar en su denuncia de dineros ilícitos en la campaña de Santos ante la Fiscalía y escogió atender a la Procuraduría). Vea la controversia del caso.

Con base a este episodio Santos esgrimió que “Álvaro Uribe se burla del Fiscal, me ha cambiado mi impresión sobre él (…) muy decepcionado, muy triste de que una persona haga ese tipo de actos para llegar al poder”.

Y ahí no termina, luego enuncia que “él quería que yo fuera su títere. No me ha dejado de atacar ni un solo día porque no fui su títere, nunca me presté para eso”.

El anuncio atornilla aún más la rivalidad entre el santismo y el uribismo de cara a las elecciones, pues de parte y parte se registran duras polémicas que vienen con nombre propio. En efecto, desde la campaña de la reelección late el escándalo de la supuesta entrada de 12 millones de dólares manchados con ‘narcos’ a la estrategia electoral de Santos en el 2010. Luego en la candidatura de Óscar Iván Zuluaga hace eco el escándalo de su presunta relación con el hacker acusado de ‘chuzar’ los diálogos de paz.