Uribe vs Vargas Lleras, un nuevo round

El expresidente acusó al ministro de vivienda de clientelista, mentiroso y le recordó episodios por los que ha sido cuestionado. Vargas Lleras se sostuvo esta semana en sus acusaciones contra Álvaro Uribe y su hermano, Santiago.

“Estoy esperando que usted aporte pruebas de reuniones mías con Mancuso. A Min Vargas Ll le queda fácil a través de sus amigos de cacería y polígono” En 2011, Uribe sostuvo en medios radiales que el exministro del interior frecuentaba a Mancuso y que, incluso, iban de cacería juntos. Versiones que el propio exjefe paramilitar ha desmentido en diligencias judiciales.

También, insistió en las denuncias que había hecho en ese momento, “Min Vargas Lleras fue a la Corte a intrigar elección de Magistrado Ibáñez. Por qué ocultan este delictuoso tráfico de influencias!” Cabe recordar que Ibañez ejerció una dura crítica al expresidente en el año 2009 por cuenta del escándalo de las “chuzadas” del DAS, de las que también Vargas Lleras fue víctima.

Pero Uribe fue más allá y lanzó más acusaciones contra el actual Minvivienda. “Senador Vargas Lleras, con poder clientelista, agudizó problemas de Comcaja, realizaron contratos con parientes suyos, y nuestro Gbo liquidó esta Caja de Compensación”.

En 2009, explotó un escándalo con el hermano de quien por entonces era presidente de Cambio Radical. Ene se momento, circularon versiones de que, como apoderado de Comcaja, Enrique Vargas Lleras habría facilitado la comisión de ilíctos.

Incluso, ya como ministro del Interior, Vargas Lleras fue cuestionado por nombrar como secretario privado y luego, como secretario general de la cartera política, a Germán Córdoba Ordóñez, quien había sido Director general de Comcaja.

Además, Uribe dijo: “Estamos esperando las pruebas del complot que según Min Vargas Ll habría hecho mi hermano Santiago para acusarlo de paramilitar”. En julio, luego de que se le abriera formalmente una investigación al ministro por nexos con grupos paramilitares en el Casanare, Vargas Lleras afirmó que todo obedecía a un complot urdido por Santiago Uribe Vélez.