Vientos de paz con el ELN

Luego de dos años y con varios tropiezos el Gobierno Nacional y el ELN anunciaron en Caracas, Venezuela, el inicio de los diálogos de paz. La mesa estará instalada en Ecuador. Las conversaciones serán directas e ininterrumpidas.

El primer acercamiento entre las partes fue en enero de 2014 en Ecuador, como parte de la fase exploratoria. Durante este lapso se trabajó en la construcción de las bases sobre las cuales se va a dialogar para llegar a un acuerdo definitivo con esta guerrilla, la segunda más antigua de nuestro país.

Brasil también hizo parte de los encuentros exploratorios. Allí durante 20 días las partes laboraron para lograr una agenda. En representación del Gobierno está Frank Pearl y del ELN está ‘Antonio García’, uno de los integrantes del comando central (COCE). No se descarta que el jefe máximo de esta organización insurgente, Nicolás Rodríguez Bautista, alias ‘Gabino’ haga parte de esta mesa de conversaciones.

El Gobierno y ELN acordaron acompañamiento de seis países garantes: Cuba, Venezuela, Noruega, Chile, Ecuador y Brasil. Asimismo establecieron que las conversaciones se harán por fases, alternando en algunas ocasiones su estadía en los países, exceptuando Noruega.

El documento contiene seis puntos: Participación de la sociedad en la construcción de paz. Democracia para la paz. Transformaciones para la paz. Víctimas. Fin del conflicto armado e Implementación.

El senador del Polo Democrático Alternativo, Iván Cepeda, habló con Confidencial Colombia sobre la nueva mesa instalada que da inició a estos diálogos. Frente al hecho dijo que el anuncio es trascendental. “Implica una nueva parte del desarrollo del proceso de paz, en términos de que se abre una nueva mesa de conversaciones que tiene una agenda en la que hay puntos distintos a los acordados con las FARC (…). Enriquece el proceso y creo que con esta decisión que toma el ELN, junto al Gobierno estamos ante lo que hemos llamado la ‘Paz Completa’, es decir no solamente la paz de carácter estable y duradero sino precisamente una Paz con todos los grupos insurgentes, que seguramente va a traer unas reformas sociales, muy importantes para el país”.

¿En qué se diferencia este proceso con el de las FARC?

Ya de entrada tenemos unos puntos comunes. Hay algunas de las temáticas que están planteadas en la agenda, que hasta donde conocemos, serán comunes con el proceso de La Habana y el del ELN, pero también está un punto nuevo que es el de participación social y ciudadana como un elemento de agenda, lo cual creemos que puede contribuir a enriquecer la participación social en la Paz.

Igualmente está el tema, así aparece señalarlo este punto, llamado de transformaciones sociales necesarias para la Paz, que es la explotación mineroenergética, punto que como se sabe el ELN ha planteado desde hace tiempo como uno de los temas sustanciales para poder llegar a la paz en Colombia.

¿Este proceso podría terminarse entre tres o cuatro años o antes?


He sido enemigo de hacer vaticinios temporales porque esos terminan convirtiéndose en especulaciones que no contribuyen al desarrollo del proceso. Lo que hay que decir es que hay unos avances con las FARC que pueden ser de utilidad y también hay una experiencia acumulada del trabajo de búsqueda de la paz con las FARC, que puede ser útil ahora que se comienzan estos nuevos diálogos con el ELN.

La Defensoría del Pueblo también se manifestó. Advirtió que el inicio de los diálogos de paz no serán fáciles, “pero espera que las conversaciones no se alarguen mucho tiempo y que las comunidades en donde opera el grupo guerrillero tengan noticias positivas de paz”.

El defensor, Alfonso Cajiao, exigió que no se repitan hechos como los denunciados en febrero pasado por el llamado paro armado de esa guerrilla en 10 municipios, en el que se amenazó y confinó a la población civil, se cerraron vías y se afectó el transporte y el comercio; además de las recurrentes acciones armados contra la infraestructura del país.

Para el funcionario resulta fundamental que se tenga en cuenta a la población civil que ha resultado víctima de las acciones de grupo insurgente, para que el proceso de diálogo evolucione de la mejor manera, teniendo como norte los principios de verdad, justicia, reparación y compromiso de no repetición.

Opositores al Gobierno de Santos han manifestado su desacuerdo con el inicio de los diálogos con el ELN: