Y la guerra sigue

Las ofensivas y los combates en Colombia cobraron este viernes la vida de al menos nueve guerrilleros y tres policías, en una jornada en la que se recrudeció el conflicto armado en paralelo a las negociaciones de paz entre el Gobierno y las Farc en Cuba.

“Una cosa es la mesa de negociación en La Habana y otra es el trabajo (de la fuerza pública) aquí en el país”, puntualizó el director de la Policía Nacional, el general José Roberto León Riaño, en una rueda de prensa en la que la cúpula militar repasó los incidentes de orden público de las últimas 48 horas.

Como telón de fondo de estos hechos se encuentra la discusión sobre una tregua bilateral durante el proceso de paz, en la que las Farc han insistido y que el Gobierno, con el presidente Juan Manuel Santos al frente, ha rechazado hasta que no haya un acuerdo.

Las Farc declararon una tregua navideña que terminó el pasado 20 de enero, y desde entonces han secuestrado, han atacado estaciones y vehículos policiales, así como infraestructuras energéticas, y hasta han declarado un paro armado.

La respuesta gubernamental a estas acciones de “presión”, como dijo ayer Santos, no será el cese el fuego que persiguen, sino “todo lo contrario”.

“Esto lo que nos estimula es a ser cada vez más contundentes. Eso que quede absolutamente claro”, dijo el presidente.

Ayer mismo las Fuerzas Militares desplegaron una ofensiva en un área rural de Tierra Alta, en el norteño departamento de Córdoba, en la que murieron al menos seis guerrilleros del bloque 5 o noroccidental de las FARC, entre ellos alias “Jacobo Arango”, comandante de esa unidad.

El ministro colombiano de Defensa, Juan Carlos Pinzón, explicó este viernes en una rueda de prensa que la muerte de este rebelde es “de gran trascendencia” por su papel dentro de la guerrilla tras 34 años de militancia.

“Era un hombre muy cercano al Mono Jojoy y a Iván Márquez y fue el responsable de muchas masacres que se registraron en Urabá (norte) durante los años ochenta y noventa” del siglo pasado, manifestó Pinzón.

Precisamente “Iván Márquez” es el jefe de la delegación guerrillera en las negociaciones de paz de La Habana.

El ministro también dijo que “es importante recordar que las FARC tienen seis bloques, cada uno con cabecillas de cierto nivel como alias “Pablo Catatumbo” o alias “Mauricio el Médico” y éste individuo acababa de alcanzar ese rango”.

En la misma rueda de prensa, el comandante de las Fuerzas Militares, el general Alejandro Navas, informó del fallecimiento de tres integrantes de la cuadrilla Luis Pardo Leal de las FARC en otra operación en La Macarena, en el céntrico departamento del Meta.

La cúpula militar y policial se reunió después en un consejo de seguridad para analizar la situación en el departamento del Chocó, fronterizo con Panamá, donde las FARC anunciaron un “paro armado” en las vías que unen a esa región con la vecina Risaralda.

A principios de mes, esta guerrilla había declarado la misma medida en todas las vías y ríos del Chocó, con el fin de que no haya tránsito y bajo la amenaza de quemar los medios de transporte que encuentren.

En otra zona fronteriza, esta vez con Venezuela, las autoridades investigan un ataque en el que fallecieron tres agentes de la Policía Fiscal y Aduanera de La Guajira en una vía entre el corregimiento de Carraipía y la ciudad de Maicao.

La portavoz de la Policía de la Guajira, la teniente Gisella Moreno, dijo a Efe que “estos hechos se atribuyen al frente 59 de las FARC”.

Por otro lado, prosigue la búsqueda de dos policías que fueron secuestrados hace una semana en el Cauca (suroeste), después de que ayer las FARC liberaran a los tres ingenieros de la petrolera canadiense Gran Tierra que habían hecho cautivos un día antes.

En el marco de estas operaciones, la Fuerza de Tarea Apolo del Ejército confirmó la existencia de explosivos en los vehículos en los que habían sido trasladados los dos policías secuestrados, abandonados después por la guerrilla en un camino del Cauca.

Mientras en Colombia sigue corriendo la sangre, los portavoces de la guerrilla en La Habana reiteraron su voluntad de paz y el presidente Santos afirmó hoy que su sueño es anunciar al país: “llegamos al fin del conflicto”.

Con Efe