Al menos 29 personas murieron y un centenar se encuentran desaparecidas tras el terremoto de magnitud 7,2 en la escala abierta de Richter que sacudió este miércoles a Guatemala.
En una rueda de prensa, el gobernante informó de que la mayor parte de las víctimas y los desaparecidos se registran en San Marcos, así como en los departamentos de Quetzaltenango, Huehuetenango, Quiché, Sololá y Totonicapán.
El presidente de Guatemala, Otto Pérez Molina aseguró que “oficialmente” las autoridades de Salud han confirmado el fallecimiento de tres personas en el hospital público del departamento de San Marcos, el más afectado del país por el terremoto, ubicado a 250 kilómetros al oeste de la capital.
Agregó que, además, hay quince personas soterradas que los cuerpos de socorro intentan rescatar.
Horas antes, el gobernador de San Marcos, Aroldo Rivera, confirmó a medios locales el fallecimiento de siete personas que quedaron soterradas por los escombros de sus viviendas, y también advirtió que la cifra de muertos puede incrementarse, según se vayan restableciendo las comunicaciones.
El movimiento telúrico, el más fuerte que se registra en este país centroamericano desde el terremoto de 1976 que se cobró la vida de más de 25.000 personas, fue sentido hacia las 10.35 hora local (16.35 GMT), tuvo una intensidad V en la escala de Mercalli. Hasta el momento se han presentado 5 réplicas menores.
El epicentro fue ubicado a 200 kilómetros al suroeste de la capital, frente a las playas de Champerico, en el departamento sureño de Retalhuleu.