Harold Henao Solano fue capturado y puesto a órdenes de las autoridades judiciales por el homicidio de Adriana Aponte, quien desapareció el pasado 27 de mayo, sobre las 10:15 am, cuando se dirigía a su lugar de trabajo a tan solo cinco cuadras de su lugar de residencia en la localidad de San Cristóbal en Bogotá.
Más de 80 horas de grabación de las cámaras de seguridad ubicadas en el sector donde fueron halladas bolsas de basura que contenían restos humanos, fueron las piezas claves de la investigación, que permitió establecer la identidad, tanto de la víctima, como del victimario.
Ese mismo día, sobre las 8 de la noche, la Policía en la misma localidad ubicada en el sur de la ciudad, recibió un llamado de la ciudadanía, por el hallazgo de unas bolsas de basura que contenían partes de un humano. De inmediato, los investigadores de la SIJIN de Bogotá arribaron al lugar de los hechos, recopilando los videos y adelantando labores de vecindario, para establecer si la mujer desaparecida, tenía una conexión con los restos.
Al día siguiente, los uniformados recibieron el reporte por parte del Instituto Nacional de Medicina Legal, corroborando que la identidad del cadáver, correspondía a la mujer desaparecida.
Al observar uno de los videos que mostraba el recorrido que frecuentemente hacía la mujer desde su vivienda al trabajo, notaron que justo al frente de una tienda, misteriosamente desaparecía.
Con estas pruebas, los investigadores solicitaron a un juez, la autorización de allanamiento al local comercial, utilizando el reactivo Bluestar (luces forenses), descubriendo que en el sitio había restos de fluidos e incluso un lago hemático, que al parecer trataron de ocultar.
Posterior a esto, la Policía enfocó su atención en el propietario de la tienda de abarrotes, como principal sospechoso, además de confirmar que el sujeto tenía como antecedente, un hecho de acto sexual abusivo con incapaz de resistir, ocurrido en el año 2013, cuando se desempeñaba como conductor de una ambulancia.
Otro hecho que notaron los uniformados, fue la ausencia del sujeto, inmediatamente inició la investigación, pues ya no era él, quien hacía la apertura del local, sino una de sus conocidas, e incluso se había ido del sector.
Es así como luego de obtener la orden de captura por parte del juez, los uniformados solicitaron los permisos para interferir su línea telefónica y de esta manera lograron ubicarlo en la localidad de Los Mártires.
En la audiencia, el sujeto no aceptó los cargos. Gracias al minucioso trabajo investigativo de la SIJIN de Bogotá en coordinación de la Fiscalía General de la Nación, el Juez avaló todas las pruebas, enviándolo a la cárcel, por el delito de homicidio agravado.