Los andenes ubicados en la Carrera Décima de Bogotá entre las calles 6 y 24 que se habían convertido en el lugar de ventas ambulantes de artículos como prendas de vestir, calzado, artículos usados, alimentos preparados, libros, entre otros, fueron recuperados por las autoridades distritales.
Durante la jornada, se adelantaron once incautaciones y se impusieron 18 comparendos por infringir el Código Nacional de Policía y Convivencia. Las autoridades, además, destruyeron 133 kilogramos y 5,5 litros de alimentos no aptos para el consumo humano.
También una persona fue capturada por venta de libros piratas en el espacio público y dos menores fueron trasladados al centro zonal del Instituto Colombiano de Bienestar Familiar (Icbf).
“La Alcaldía de Bogotá realiza una gran intervención de espacio público en la Carrera Décima, donde se venía dando una ocupación del espacio público durante años. Más de 1.400 vendedores habían ocupado el sector y los establecimientos formales, que pagan impuestos, nos venían demandando la intervención, por lo que ellos consideraban una competencia desleal respecto a la actividad que ejercen”, señaló el secretario de Gobierno, Iván Casas Ruiz.
Además de la solicitud de los vendedores formales, la venta de elementos de dudosa procedencia y de contrabando, así como la piratería, alertaron y llevaron a las autoridades a adelantar la intervención.
La recuperación de la zona también se dio por la presencia de 22 cilindros de gas que eran utilizados para la preparación de los alimentos y que se convertían en un inminente riesgo ante posibles explosiones o accidentes.
A través del Instituto para la Economía Social (Ipes), de la Alcaldía de Bogotá, se estableció que en la zona había un total de 1.448 vendedores informales (545 mujeres y 903 hombres), quienes fueron identificados y caracterizados. De ellos, 765 mostraron interés en acogerse a alguno de los programas que les ofreció la Alcaldía de Bogotá durante cuatro jornadas que comenzaron en el 2016 y se extendieron hasta este año.
“Ofertamos alternativas a los vendedores informales que ocupaban el espacio público en el centro de la ciudad. Así la Alcaldía de Bogotá reafirma su compromiso con la entrega de diferentes alternativas para su bienestar, con el fin de garantizarles espacios dignos y seguros donde puedan comercializar sus productos”, agregó María Gladys Valero, directora del Ipes.
De acuerdo con las autoridades, durante el primer semestre de este año, en esta zona se registraron 869 hurtos a personas, lo que representa un incremento en 28 casos, en relación con el mismo período del 2018- y se reportaron más de 900 confrontaciones violentas.