Un caso similar al de la empanada más cara del mundo ocurrió en la ciudad de Bogotá, esta vez con un chocorramo, que normalmente suele costar entre los 1.600 y 1.800 pesos.
Ever David trabaja prestando el servicio de transporte en su camioneta, para lo cual, cuenta con un permiso especial para movilizarse entre la capital del país y los municipios a donde debe desplazarse.
En horas de la mañana, mientras comía un chocorramo, un policía se acercó a su camioneta y le impuso una orden para comparecer, aplicando el artículo 35-2 de la Ley 1801 (Convivencia), que establece una multa por $ 936.200 por un millón de pesos. El motivo: no tener el tapabocas en su lugar, a lo que Ever David contestó, que no se puede comer con el tapabocas puesto.
Según cuenta en el video que público en redes sociales, un superior por radio le preguntaba al policía por el número de comparendos que llevaba, lo que le hizo pensar a Ever David que el patrullero le habría convertido en una especie de víctima de cuotas impuestas con los que al parecer, los agentes deben cumplir.
Confidencial Colombia se comunicó con la Policía Metropolitana de Bogotá, quien negó que se esté obligando a los agentes a cumplir con alguna cuota de órdenes para comparecer.
Ever David deberá comparecer en la Alcaldía Local de Santa Fé, en donde podrá apelar, explicando los hechos y ya depende del funcionario, si hace efectiva la multa. En caso de que se decida que el ciudadano incumplió con la norma, este hecho se lo podrá recordar como, “el Chocorramo más caro del mundo”.