Uno de los compromisos adquiridos por Carlos Fernando Galán al posesionarse como alcalde de Bogotá fue el trabajar las 24 horas para garantizar la seguridad de los bogotanos, y aunque indudablemente ha realizado una incansable labor durante los primeros cien días de su gobierno la tarea no parece fácil de llevar a cabo.
El primer trabajo que Galán tuvo que ejercer en esta materia es la recomposición de las relaciones de la Administración Distrital con la Policía, Fiscalía y Fuerzas Militares, rotas durante la alcaldía de Claudia López. Esto, según la Secretaría Distrital de Seguridad, “permitió la captura de 8.302 personas (7.106 en flagrancia y 1.196 por orden judicial), desarticulado 13 organizaciones criminales y se impactaron 123 bandas delincuenciales. Así mismo, se realizaron más de 200 allanamientos y se incautaron 265 armas de fuego ilegales y 1 millón de dosis de estupefacientes”.
Gracias al diálogo permanente con la Policía Nacional, se asignaron 900 uniformados más para combatir la delincuencia en Bogotá y 750 servicios parciales adicionales, miembros de escuelas y direcciones nacionales, para apoyar planes operativos en áreas específicas. También se destinaron dos helicópteros más (para un total de tres) y un sistema de drones que fortaleció la vigilancia aérea permanente en la zona rural y urbana.
La Secretaría de Seguridad intensificó los operativos contra la delincuencia, logrando la captura de alias Gocho, señalado jefe de sicarios de la estructura ‘Los Satanás’ y alias Maracucho o Pedrito, segundo al mando de esta organización. También se capturó a alias Vitico o Moco, lo mismo que 13 delincuentes de la organización ‘Los de la Tercera’, dedicada al tráfico de estupefacientes y a integrantes de la banda delincuencial ‘Los del Sendero’, señalados de hurtar a deportistas y visitantes de los Cerros Orientales.
Así mismo, se han detenido a 50 delincuente que extorsionaban a comerciantes y residentes de diferentes sectores de la ciudad. Algunos de estos criminales se hacían pasar por bandas criminales como ‘El Tren de Aragua’.
Aun así, la tarea resulta incompleta y los ciudadanos no ven los resultados por más que se confirmen capturas. El hurto callejero no desaparece y la gente se siente bastante atemorizada. El reciente informe del Programa Bogotá Cómo Vamos revela que, entre los meses de enero y marzo, el Hurto Callejero pasó de 37.133 en 2023 a 28.610 en 2024.
También se redujo el número de homicidios, en el mismo período de tiempo se presentaron 17 asesinatos menos que entre enero y marzo de 2023.
Al respecto, el concejal del Movimiento LARA, Julián Forero, considera que es necesario realizar un esfuerzo muchísimo mayor para garantizar a los ciudadanos la tranquilidad que necesitan. Por su parte, la concejal del Centro Democrático, Sandra Forero, reclama al alcalde Galán la pronta expedición del decreto que prohíbe el consumo de estupefacientes en el espacio público de Bogotá.
El concejal del Nuevo Liberalismo, Juan Manuel Díaz, reconoce los logros del alcalde Galán en esta materia y pide a los bogotanos no desesperarse, “no podemos desesperarnos, recibimos una papa caliente; una ciudad abandonada y entregada a la inseguridad”.
Un tema que el alcalde Galán debe trabajar con urgencia es el delito de extorsión, esto luego de la protesta que se presentó en Bogotá protagonizada por comerciantes de la localidad de Kennedy, quienes bloquearon durante todo un día la Calle 13 con Avenida Ciudad de Cali, afectando la movilidad de buena parte de la ciudad.
El ministro de Justicia, Néstor Osuna, en entrevista para Confidencial Colombia reveló que el 37% de las llamadas extorsivas se hacen desde las cárceles y anunció que muy pronto se instalará un sistema que permite la desactivación de celulares en las prisiones.
Para exterminar la presencia de este delito en Bogotá, la Alcaldía deberá trabajar en coordinación con la Policía, el Ejército, la Fiscalía, pero también con el Instituto Nacional Penitenciario y Carcelario – INPEC, siendo esta la parte más difícil porque es claro que si un celular ingresa a una prisión es porque alguien lo permitió y para esto debe no solo investigarse, sino además realizar un saneamiento a la guardia de vigilancia, labor en la que debe trabajar la Procuraduría General de la Nación.
Aunque gran parte de la opinión pública en Bogotá reconoce los esfuerzos realizados por el alcalde Carlos Fernando Galán para luchar contra el crimen organizado y la delincuencia en Bogotá, durante los primeros cien días de gobierno, no duda en recomendarle poner gran dedicación en esta materia para garantizar la tranquilidad a la población en la capital del país.