El Gobierno brasileño anunció hoy que la presidenta Dilma Rousseff ha firmado un decreto mediante el cual el salario mínimo de los trabajadores del país aumentará un 11,6% a partir del próximo 1 de enero.
Con esa subida, el ingreso mínimo llegará en Brasil a 880 reales, que equivalen a casi 209 euros según el cambio de hoy.
“El Gobierno da continuidad así a su política de valorización del salario mínimo, que tiene un impacto directo sobre 40 millones de trabajadores y jubilados, que actualmente reciben el piso salarial”, dice una breve nota en la que fue anunciado el aumento.
Esa alza servirá para compensar la inflación acumulada durante este año, que según coinciden analistas privados y el Banco Central cerrará situada en casi un 11%.
Según la nota, el decreto será publicado mañana en el Diario Oficial y el nuevo valor del salario mínimo entrará en vigor el día 1 de enero.
