La empresa Enka de Colombia manifestó que si el gobierno decide promover en 2014 una nueva reforma tributaria, esta debe hacerse pensando en los empresarios y en el empleo pues tal y como van las cosas el empresariado está debilitado y con pocas ganas de seguir en el mercado.
Esta reconocida firma pidió unas reglas de juego claras en donde se permita la competencia dentro del marco de la legalidad y sin la perversa influencia del contrabando que quiebra empresas y lastima negocios.
En diálogo con Confidencial Colombia, el presidente de Enka de Colombia, Álvaro Hincapié Vélez precisó que quien esté al frente de dicha reforma debe estar al tanto del sector industrial que viene de capa caída por las gigantescas importaciones y por el terrible efecto del contrabando.
“Este año que termina vimos lamentablemente el cierre de Icollantas y el de muchas compañías. Es por eso que necesitamos un sector industrial fortalecido y por lo mismo esperamos una tributaria que les ayude a las empresas para fomentar empleo y poder ver una Colombia más fortalecida”, indicó el industrial.
En su opinión, el énfasis del nuevo estatuto tributario debe ser el mayor control a la evasión y a la elusión porque es muy complicado competir en Colombia con flagelos como el contrabando que finalmente se lleva una tajada importante de las ventas totales del país.
Agregó que el ejecutivo debe dedicarse más a controlar que a castigar o a hacer menos competitivos los productos hechos en Colombia. “El gobierno ha venido trabajando muy fuerte en eso y para el TLC con Panamá se está exigiendo una normatividad diferente que permite tener igualdad de condiciones.”.
Para el empresario competir con el contrabando es ir contra la corriente porque en muchas ocasiones hay productos que llegan a unos precios muy bajos, a tal punto que los precios de las materias primas son inferiores al precio final del producto terminado e importado.
Un año sin novedad
Enka de Colombia estimó que el balance de la empresa al final del ejercicio económico arrojará unos resultados en línea con lo presentado en el tercer trimestre, es decir que no habrá cambios drásticos. La empresa cree que al cierre de 2013 habrá una caída del cuatro por ciento en unidades despachadas frente a 2012.
“Ha habido una caída fuerte en la venta de filamentos e hilos industriales lo cual ha sido compensado con las ventas adicionales de PET. Esta menor venta es la consecuencia de las grandes entradas de telas y prendas a precios imposibles de competir, es por eso que el sector textil se ha visto duramente afectado y así lo muestra la caída en las exportaciones no solo en telas sino en prendas y confecciones”.
Un factor determinante para salvar empresas y puestos de trabajo es incentivar la marca nacional y las compras por el producto nacional tal y como ocurre en Estados Unidos en donde la pasión y el compromiso con sus productores mantiene la economía vigorosa y con perspectiva.
“Colombia goza de prestigio en confección y fabricación de textiles, esperamos que esa ayuda de los nacionales venga para seguir adelante fomentando futuro y construyendo un país socialmente más viable. Me parece importante atacar los mercados externos, pero indiscutiblemente hay que entender que la sostenibilidad está en la ventaja competitiva y por eso estamos enfocados en proyectos sostenibles que son los que marcarán la diferencia”, afirmó Hincapié Vélez.
Sobre la tasa de cambio, el empresario dijo que si bien 1.900 pesos es un punto aceptable, lo ideal es que esta llegue a los 2.000 pesos.
Una empresa con tejido social
Basando la estrategia en inversión, innovación y tecnología, la empresa Enka de Colombia le apunta a crecer en el mercado de las fibras y productos de valor agregado en donde las exportaciones crecerán considerablemente a Estados Unidos y otros países sin barreras arancelarias.
Tan grande es el entusiasmo en la empresa antioqueña que sus directivas están por inaugurar una planta de energía para poder alimentar los procesos productivos y tener una energía de menor costo para ser cada vez más competitivos.
Enka de Colombia, productora y comercializadora de polímeros y fibras químicas de poliéster y nylon así como de materias primas y textiles reportó un cambio en el esquema de negocio porque sus conductores están direccionando el ejercicio hacia productos de alta tecnología, dejándoles los llamados commodities a los empresarios asiáticos y focalizando la actividad en nichos y productos de alto valor agregado.
Por tal motivo la firma incursionó en el negocio del reciclaje y en la fábrica de lonas para llantas en donde las restricciones y las homologaciones son muy difíciles.
Cabe precisar que desde 2009 la empresa ha hecho inversiones importantes en el tema de la sostenibilidad.
Proyecto de 30 millones de dólares
El presidente de Enka de Colombia, Álvaro Hincapié Vélez afirmó que la inversión realizada por la empresa en la nueva planta botella a botella en donde es reciclado el PET (Polietilentereftalato) ascendió a 30 millones de dólares lo cual es una muestra de innovación y responsabilidad medioambiental toda vez que disminuye la huella de carbono, reduce el consumo de energía y las emisiones de CO2.
“Estos esfuerzos hechos para cerrar el ciclo del PET, evitan que Colombia siga contaminándose pues anualmente se acumulan millones de botellas de plástico las cuales tardan más de cien años en degradarse. La nueva resina reciclada fortalece la vocación de Enka hacia los negocios verdes y complementa su portafolio actual de productos amigables con la naturaleza” anotó el señor Hincapié Vélez.
Informó que Enka se ha consolidado como líder en reciclaje PET toda vez que procesa más de 850 millones de botellas anualmente, que de no procesarse llegarían a ríos, playas, campos y ciudades aumentando los niveles de contaminación.
Este programa adelantado en común acuerdo con Coca Cola y Coca Cola Femsa cuenta con una red nacional de reciclaje que involucra a más de 8.600 personas recicladoras con lo cual se favorece a uno de los sectores más vulnerables del país. “Estamos hablando de madres cabeza de familia y de personas desplazadas y reinsertadas que reciben 40.000 millones de pesos al año en más de 25 departamentos en donde hay centros de acopio propios”.
Es de precisar que la resina reciclada por Enka cumple con la normatividad vigente y cuenta además con la aprobación del Invima de Colombia, la FDA de Estados Unidos y la EFSA de la Unión Europea.
Enka fue fundada en 1964 y desde entonces se ha afianzado como una de las principales productoras de polímeros y fibras sintéticas de América Latina. En la empresa la sostenibilidad es un elemento vital en su estrategia que articula aspectos económicos, sociales y éticos.
