La Procuraduría General de la Nación formuló pliego de cargos contra siete militares pertenecientes al batallón de infantería N°13, General Custodio García Rovira, en Norte de Santander, por su presunta responsabilidad en el homicidio de Joel Aguablanca Villamizar, líder etnoeducativo de la comunidad indígena U’wa durante una operación para capturar al cabecilla del ELN, Darío Quiñónez Villamizar, alias “Marcial”.
Los hechos ocurrieron el 2 de junio de 2020 en la vereda Rio Colorado, jurisdicción de Chítaga, Norte de Santander, finca en la que residía Aguablanca Villamizar con su esposa, hijos menores de edad y un cuñado con síndrome de Down. En la tarde del 1 de junio, un grupo de cinco guerrilleros fuertemente armados del ELN, al mando de alias “Marcial”, llegó a la finca y obligó a quienes allí habitaban a permitir que pasaran la noche.
El asesinato del líder indígena se presentó cuando los uniformados del Ejército llegaron al lugar y se presentó el cruce de balas con los guerrilleros del ELN. En el hecho, Aguablanca fue herido y, a pesar de haber recibido los primeros auxilios por parte del enfermero de la unidad militar, murió una hora después mientras esperaban un helicóptero para evacuarlo.
En su auto de cargos, el Ministerio Público asegura que los militares “habrían incurrido en una serie de irregularidades que desencadenaron en la muerte de Joel Aguablanca Villamizar, hecho que pudo evitarse si se hubiera cumplido el objetivo para el cual fue emitida la orden de operaciones N°013, la cual consistía en la captura de alias Marcial y los integrantes de su comisión”.