Un POT que pone en riesgo los colegios privados de Bogotá

La alcaldesa Claudia López en su discurso de defensa del nefasto POT, habla de cómo este va a fomentar los servicios del cuidado y como se van a poder implementar en la ciudad con el fin de “pagar la deuda social” por los próximos años y que no es más que otra promesa fallida lejos de la realidad y del discurso de la alcaldesa.

En el artículo 94 del Decreto 555 de 2021 se define: …“Con este Sistema se territorializa el cuidado en el POT, garantizando suficientes equipamientos y correctamente distribuidos en el territorio para responder a las demandas locales y a los recorridos poligonales que realizan cotidianamente las personas cuidadoras en Bogotá.”… Dentro de esta categoría se incluye la educación de primera infancia, básica y media donde las instituciones privadas cumplen un papel fundamental.

Según cifras de la Secretaría Distrital de Educación en 2021 los colegios privados representaron el 35,9% de la matrícula en Bogotá porque han brindado atención y servicios a 446.113 alumnos principalmente de las localidades de Suba (103.655), Usaquén (41.831), Kennedy (48.688), Engativá (49.591) y Bosa (32.003) y emplean a 27.673 docentes en toda la ciudad.

En el POT se “insiste” en la priorización de los equipamientos para la educación. En la realidad, al momento de aplicar la norma está restringe los colegios privados y no permite que mejoren sus condiciones a la atención, cuidado y enseñanza que brindan desde hace décadas muchos de ellos a las ciudad y ahí si, dentro de una visión de 30 minutos.

Los propietarios de estos colegios me han manifestado la preocupación sobre cómo las denominadas “Actuaciones estratégicas” impiden el desarrollo y en algunos casos la legalización de sus infraestructuras educativas al no estar reglamentadas en la actualidad estas actuaciones y como lo he evidenciado constantemente va a congelar el desarrollo de la ciudad en lugar de …”detonar procesos de revitalización y desarrollo en lugares estratégicos para la ciudad”… cómo define la planeación sobre esto.

Otro aspecto que preocupa enormemente a estas comunidades es como la reglamentación del estándar de calidad espacial y el plan maestro del cuidado que del primero el borrador publicado las exigencias no tienen en cuenta las condiciones en las que es estos colegios se han desarrollado en los barrios y su papel en la construcción del tejido social y una atención oportuna a las comunidades y del segundo no se conoce si continuarán con los “ambientes compartidos” implementado en el plan maestro de equipamientos de 2006.

Los colegios privados son fundamentales para la ciudad y los bogotanos en aras de romper con la brecha de desigualdad y así tener jóvenes más capacitados para afrontar las necesidades que se requieren para la capital y el país, por eso preocupa enormemente que este POT de afán los esté afectado de la forma que lo hace, mientras la alcaldesa habla de cómo el sistema distrital del cuidado es el pago a “la deuda social”.

Lucía Bastidas

Buscar

Anuncios