Un grupo de docentes e indígenas del departamento del Cauca llegaron a Bogotá para marchar hacia la Plaza de Bolívar en señal de protesta por una supuesta masacre laboral y el cambio de la empresa de salud.
Los manifestantes exigen al Gobierno nacional que los recursos de la salud no sean manejados por intermediarios, sino por ellos mismos.
Quienes participaron en la protesta trataron de ingresar al Capitolio Nacional para tomarse las instalaciones del Congreso de la República por la fuerza, aprovechando que adentro se encontraban senadores y representantes para dar inicio a las sesiones extras convocadas por el Gobierno Nacional.
Ante este intento de toma, fue necesaria la intervención del Escuadrón Antimotines de la Policía, quienes evitaron el ingreso de los manifestantes.