Mientras los jugadores del Tolima y del Santa Fe disputaban el partido en el Estado el Campin de Bogotá, un grupo de hinchas del equipo visitante iniciaron un enfrentamiento con la barra del equipo contrario.
El partido de fútbol se interrumpió mientras la Policía controlaba la situación que estuvo a punto de salirse de control en el momento en que la barra del Tolima comenzó a arrancar las sillas del estadio para tirarlas a las personas que acompañaban al Santa Fe.
Hubo momentos de tensión en el escenario, ya que varias familias presentes con sus niños, tuvieron que protegerse de las agresiones.