El Barça, campeón de la Copa de la Reina/Europapress
El Barça Femenino derrotó con autoridad (8-0) a la Real Sociedad este sábado para conquistar la Copa de la Reina por décima vez, un título que supone el triplete nacional esta campaña con una nueva exhibición en el Estadio de La Romareda de Zaragoza, con la motivación muy alta a una semana de la final de Liga de Campeones.
El equipo azulgrana cumplió con su favoritismo y sacó de la ecuación a una Real que quiso ser valiente pero que pagó sus errores y vio truncarse muy pronto su plan. A los cinco minutos se puso por delante un Barça que añadió la Copa a la Liga F y la Supercopa, antes de medirse al Olympique de Lyon el próximo sábado en la final de Champions que acogerá San Mamés (Bilbao).
A la media hora, la final estaba vista para sentencia (5-0). El Barça asfixió con su presión alta y castigó los errores de una Real que quiso salir de atrás jugando y falló ante un rival temible. Las de Jonatan Giráldez se desquitaron de la eliminación en Copa el año pasado por alineación indebida y pasaron por encima de la Real.
Con algo de suspense por la revisión del VAR, Ona Batlle abrió la lata a los cinco minutos ganando la espalda a la zaga rival. Poco después, Salma Paralluelo tuvo el honor de hacer el segundo en su casa, que dio paso al doblete de Graham y a otro más de Batlle. La Real estuvo lejos de robarle el balón al cuadro culé y se vio encerrada y fulminada a base de goles en media hora.
La afición ‘txuri-urdin’ trató de acompañar a las suyas, levantadas de golpe del sueño que había labrado en su buen camino hasta la final. Tras el descanso, Giráldez empezó a pensar en la final continental sacando a Aitana Bonmatí por Alexia Putellas y poco después a Salma Paralluelo y Patri Guijarro, pero el Barça siguió con el colmillo afilado para ampliar su renta.
El guion fue el mismo, con el sexto de Mariona y el séptimo, también con algo de VAR, de Claudia Pina. Natalia Arroyo movió su banquillo también, pero llegó el doblete de Mariona para poner el 8-0 que ya calmó el hambre azulgrana para la media hora final. No tuvo rival un Barça que se lució ante la buena entrada de La Romareda, más de 25.000 espectadores.
La reina Letizia hizo entrega del trofeo a Alexia Putellas en el palco, para bajar a celebrar con sus compañeras otro éxito de un Barça insaciable. Con poco tiempo para fiestas, las de Giráldez apuntan ahora a la defensa de la Champions en su quinta final de los últimos seis años, en busca de su tercera corona europea.